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Vox lidera las búsquedas de los partidos políticos por Internet en todas las autonomías

Internet República ha publicado su III Barómetro sobre las elecciones 2019 en Internet y en redes sociales, en el que se han analizado las búsquedas sobre los cinco principales partidos políticos realizadas tanto en las comunidades autónomas  que acuden a las urnas como en las principales ciudades españolas. En este tercer estudio se incluye, además, el interés generado en Internet por los partidos políticos en las regiones en los dos últimos meses y en las 100 ciudades del país que más interés han mostrado en los partidos a lo largo del último año. Especialmente, se han analizado dos comunidades autónomas, la Comunidad de Madrid y la Comunidad Valenciana, que son las autonomías que cuentan con más de cinco millones de habitantes y por tanto más electores. A la hora de analizar las búsquedas, Google aporta más datos que en el resto y permite realizar comparaciones de búsqueda más detalladas. Hay que tener en cuenta que este año no se celebran elecciones autonómicas en Andalucía, Cataluña, Galicia y País Vasco, que son comunidades autónomas altamente pobladas. Analizando todas las autonomías, la característica común es que Vox es el partido más buscado, con un porcentaje superior al 40% y, en comunidades como Cantabria, Cataluña, Ceuta, Islas Baleares y Murcia, las búsquedas superan el 50%.   Orden de búsquedas de Google en la Comunidad de Madrid: Vox, PP, Podemos, PSOE y Ciudadanos En Madrid, como vemos en el siguiente gráfico, Vox sigue siendo el partido más buscado en la red, seguido del PP y Podemos. PSOE y Ciudadanos son los dos partidos que han despertado menos interés de los cinco de ámbito estatal, y Ciudadanos está en retroceso de búsquedas. Los madrileños buscan más en internet a Íñigo Errejón que a Isabel Serra La comparación entre los dos candidatos de Podemos y Más…
Madrid, 10 de julio de 2015. Conferencia política del Partido Popular. Un vídeo de Lillian Tintori, mujer del preso venezolano Leopoldo López, abre el evento. En él, Tintori da las gracias a Felipe González y a Mariano Rajoy por su cercanía, y sirve al presidente del Gobierno para centrar el mensaje clave de su campaña electoral: la libertad. “¡La vamos a afirmar y la vamos a defender!”, afirma con fuerza el primer ministro. El golpe de efecto es evidente, y los destinatarios, también: el miedo a Podemos y a su supuesta identificación con las formas de actuar bolivarianas; el ataque colateral al PSOE, por haber apoyado a los populistas en diversos ayuntamientos y comunidades. ¿Pero se puede decir que el PP favorece la libertad? ¿Un partido que sube los impuestos a niveles históricos y ahoga la vida económica, que no permite el debate interno en sus filas? ¿Quién cree la apología de la libertad si se siente maltratado? Desde luego, estamos hablando de niveles distintos. España, por fortuna, está muy por encima de Venezuela en niveles de libertad. Pero las cotas de corrupción siguen siendo indignantes, como lo son las dificultades para llegar a final de mes o las infinitas trabas municipales y autonómicas para las iniciativas y para crear empresas. Los partidos políticos tienen mucho que hacer. En primer lugar, el que está actualmente en el Gobierno. Quizá por eso, Cayetana Álvarez de Toledo cree que la conferencia política fue una oportunidad perdida. “No ha servido para plantear un debate profundo”, señala. En opinión de esta joven diputada del PP, nos encontramos en el momento más crítico desde que se llevó a cabo la Transición. Piensa que España necesita una fuerza política de centro derecha moderna, abierta, fuerte, valiente, liberal y ganadora. Su objetivo debería ser agrupar a todo el espacio de…
Tan claro y contundente como polémico y puntiagudo. Daniel Lacalle (Madrid, 1967) es uno de los economistas más conocidos en España, en buena parte por su dilatada trayectoria de reconocimientos a nivel nacional e internacional. Sus dotes de comunicación le han granjeado una importante presencia en medios como El Español y hasta La Sexta, un medio con una línea editorial muy alejada de su pensamiento. Liberal sin complejos, asesor económico de la Fundación Concordia y Libertad y simpatizante del cartel del líder del PP, Pablo Casado, Lacalle desgrana para Capital una visión económica llamada a impregnar el debate público en los próximos meses. La eterna pregunta: ¿en España pagamos muchos o pocos impuestos? La cuña fiscal de empresas y familias, esto es, lo que pagamos en impuestos con respecto a lo que ganamos, es muy alta. El 80% de los ciudadanos considera que paga demasiados impuestos. Sin embargo, el ratio recaudatorio, es decir, ingresos fiscales con respecto al PIB, es inferior a la media europea. ¿Cómo puede suceder esto? Porque esa cuña fiscal, creciente con los años, supone un límite al crecimiento económico; porque las empresas son mucho más pequeñas - incluidas las que llamamos grandes - que las de otros países europeos; y porque en España hay mucho más paro que en la media de los países de Europa. Cuando se habla de política económica se piensa principalmente en el empleo. ¿Cuál es el problema de España? España tiene una tasa de desempleo medio del 20% desde los años 80. La fiscalidad y la burocracia existente desde entonces no parecen haber ayudado a resolver el problema. Cada cierto tiempo además viene una ola de populismo que dice que la solución a los males endémicos es gastar más y subir todos los impuestos. Eso frena nuestra capacidad de obtener inversión…
José Ramón Pin Arboledas es profesor del IESE. La decisión del Comité Ejecutivo de Ciudadanos de no pactar con el PSOE después de las elecciones podría marcar claramente una frontera electoral entre las derechas (PP, C’s y Vox) y las izquierdas (PSOE, Unidos Podemos+confluencias). Pero también se podría poner la frontera entre constitucionalistas puros, partidarios de la política dura en Cataluña y aquellos que son pactistas y aún creen en el diálogo con los independentistas. De que se polarice la campaña electoral en un sentido o en otro se podrá hablar de una polarización u otra. A algunos, como a Ciudadanos, les interesa la segunda frontera. A otros, como el PSOE, les interesa la primera. Ciudadanos quiere que el debate se centre en la posible aplicación o no de un nuevo 155 en Cataluña que desplace a los independentistas del poder y les arrebate sus instrumentos de propaganda: TV3 y unos presupuestos, los de la Generalidad, con los que riegan generosamente a sus activistas, incluyendo ANC y Ómnium Cultural. Ya lo dijo Errejón: “Hay que crear lugares de refugio para los revolucionarios porque de algo tienen que vivir”. En eso, la izquierda radical y el independentismo son iguales. Su negativa a pactar con el PSOE postelectoralmente es un intento de recoger a todo el electorado centrista que no ve con buenos ojos el “supuesto pactismo de Sánchez”. A otros, como el PSOE de Pedro Sánchez, les interesa que se polarice la discusión entre la ideología progresista y la conservadora (que ellos tachan de derecha, o incluso de extrema derecha). Su estrategia, vieja como la misma izquierda, es el grito de: “¡Que viene la derecha, o las derechas (como ahora dicen)!”. Los que no jueguen en estos dos campos quedarán fuera. Por eso el PP tratará de centrarse en la posible…
Manuel Martín Algarra es catedrático de la Facultad de Comunicación de la Universidad de Navarra. La guerra en Podemos entre Íñigo Errejón y Pablo Iglesias fue el tema hace unas semanas. Todavía está caliente el enfrentamiento entre Susana Díaz y Pedro Sánchez por el PSOE, y la guerra entre Soraya Sáenz de Santamaría y María Dolores de Cospedal en el PP terminó con las dos fuera del tablero. Incluso en la mermada IU, Llamazares y Garzón se enfrentaron. El conflicto se ha instalado también en los partidos políticos de Suecia, Reino Unido, Francia, Italia, Alemania, EE.UU.... No deja de ser paradójico, pues la política es la alternativa a la guerra. Al reconocer la dignidad y derechos de cada ciudadano, la democracia logra que los conflictos normales en la vida colectiva se resuelvan entre todos. Es más complejo, pero es mejor. Precisa de un conocimiento profundo de la condición humana y de la creación de mecanismos para hacerlo posible. El conocimiento básico sobre el que se construye la democracia es la certeza de que todos los seres humanos somos iguales en dignidad. Y los principales mecanismos que permiten una convivencia pacífica son leyes respetuosas con la dignidad humana e instituciones que representen a los ciudadanos y garanticen su igualdad ante la ley. Por eso las instituciones en los países democráticos, las que encarnan personas como el jefe del estado o el de gobierno, o las formadas en órganos colectivos como parlamentos, tribunales o partidos políticos, deben asumir escrupulosamente la dignidad de los ciudadanos, el imperio de la ley y la transparencia en la vida pública. Esto no evita los conflictos, pero garantiza que su resolución será respetuosa con la dignidad y los derechos de cada uno. ¿Qué pasa hoy a la democracia? ¿Por qué la política se ha convertido en un…
El libro 'Más allá de los negocios. Miradas y visiones de empresarios sobre la economía, la sociedad y la política', basado en un proyecto de investigación financiado por Funcas y presentado ayer en Madrid, ofrece una panorámica de los razonamientos y las opiniones de cuarenta empresarios y directivos, de prácticamente todas las comunidades autónomas y de diversos sectores económicos, sobre cuestiones económicas, políticas y sociales. La voz de los empresarios, escuchada a través de entrevistas en profundidad y recogida en este libro editado por Funcas, expresa descontento con la clase política y las organizaciones empresariales y sindicales, así como con la dimensión regulatoria de las Administraciones Públicas. A los políticos les exigen una mayor voluntad de alcanzar pactos estables y resolver problemas crónicos y les reprochan su limitada competencia técnica y su tendencia a anteponer los intereses políticos a aquellos problemas que preocupan verdaderamente a la sociedad. De las instituciones de representación de intereses los empresarios entrevistados critican su limitada representatividad, la excesiva politización y el comportamiento poco ético de algunos de sus líderes. Creen asimismo que las Administraciones Públicas no facilitan la actividad empresarial, tanto por el excesivo burocratismo como por la profusión y diversidad territorial de la normativa con incidencia en las empresas. En cuanto a la economía, los empresarios entrevistados relacionan los males de España -en particular, el elevado paro- con su debilidad industrial y la excesiva dependencia de la construcción y de los servicios de hostelería, turismo y restauración. No obstante, señalan que las demandas de cambio de modelo productivo no pueden pasar por alto las ventajas de España en esos sectores y, más que por una nueva distribución sectorial, apuestan por mejorar la calidad en los bienes y servicios en los que tradicionalmente la economía española ha sido fuerte y tiene ventajas competitivas naturales. Una…
La subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) de los 735 a los 900 euros que plantea el Gobierno de Pedro Sánchez suscita posiciones encontradas. Los hay que creen que es una medida que llega tarde tras varios años de recuperación económica y también están los que piensan que esta subida puede destruir mucho empleo. Los expertos, para colmo, tampoco se acaban de poner de acuerdo en ciertos puntos aunque sí en lo general: reducirá en sentido amplio la desigualdad y tendrá un efecto, mayor o menor, en el empleo. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ha respaldado la “necesaria” subida del SMI. “Los salarios de España necesitaban una actualización para ponerse a la altura de la UE en términos de porcentaje sobre el sueldo medio. El SMI es un mínimo de protección social y sirve para evitar que haya empleos de extrema precariedad”, ha dicho el secretario general, Ángel Gurría. “No es que vaya a encarecer enormemente la cuenta de los que tienen que pagar los salarios, sino que el ajuste era necesario y razonable”, ha dicho. El director de Coyuntura y Economía Internacional de Funcas, Raymond Torres, entiende que el actual SMI de España “es más bajo en términos absolutos y relativamente más bajo con respecto a la mediana salarial” del resto de Europa. En el continente, el ratio del SMI es del 55% de la mediana salarial, mientras que en España actualmente no llega al 40%, según Torres, que incide igualmente en que su cobertura en España es baja. De acuerdo con este experto, la subida del SMI tendrá un impacto en el empleo que será “perfectamente asumible a largo plazo”. En la misma línea, puntualiza que ha habido países como Alemania que no tenían SMI y han pasado a tenerlo sin que ello…
El PSOE comenzó a ser “nuevo” el día en que Rodríguez Zapatero le ganó el congreso a José Bono por 9 votos de diferencia. Es bien sabido que Zapatero le debió aquella victoria a los votos cedidos por los guerristas, que se los hurtaron a su propia candidata, Matilde Fernández. Además de los tres citados, hubo otra candidata: Rosa Díez, quien después montaría su propio partido. Desde el primer momento Zapatero se propuso quitar de en medio a la “vieja guardia’ y cuando llegó al Gobierno (2004) se dedicó a promocionar “nuevos” valores, mayormente femeninos, que ni en sueños hubieran imaginado llegar adonde Zapatero las puso, pero Zapatero mantuvo a algunos notables del felipismo en puestos de Gobierno (Pedro Solbes, Alfredo Pérez Rubalcaba e incluso José Bono). Asimismo nos colocó a unos cuantos de aquella cuerda en puestos de relumbrón pero sin mando en plaza, por ejemplo, presidiendo comisiones en el Congreso. Lo que caracterizó a la etapa de Zapatero al frente del PSOE (al margen de las ocurrencias que le fabricaba Miguel Sebastián) son dos invasiones que, a mi juicio, han arruinado al Partido: 1. Lo políticamente correcto, sobre todo en su versión feminista (desde las sandeces lingüísticas a las listas cremallera). 2. El virus catalán que le llevó, de la mano de Maragall, a impulsar un nuevo Estatuto de Cataluña, cuyo desastre me abstendré de glosar aquí. Tras el interregno de Alfredo Pérez Rubalcaba llegaron unas salvíficas “primarias” y con ellas el primer triunfo de Pedro Sánchez; con él, y tras las elecciones generales (2015), apareció la disgregación electoral y el consiguiente nacimiento de “nuevas” formaciones, alguna de ellas (Podemos) ideológicamente tan vieja como la tos. En fin, una vez que acumuló los puestos de líder parlamentario y orgánico comenzó Sánchez su andadura, apoyando y apoyándose (a partir…
El Real Instituto Elcano ha presentado su informe España en el mundo durante 2019: perspectivas y desafíos. Lo ha hecho con una mesa redonda en la que han participado sus investigadores Lara Lázaro, Iliana Olivié, Federico Steinberg e Ignacio Molina (coordinador del estudio). La ha moderado Charles Powell, su director. La parte económica ha sido explicada por Federico Steinberg. Su visión es que la economía global y la española van bien, aunque podrían verse afectadas por algunos riesgos: fundamentalmente, los efectos de la guerra comercial entre Estados Unidos y China, el Brexit y la ola populista. El turno de preguntas ha servido para preguntar si incluirían a Vox en esa ola populista, o solo Podemos la representaría en España. Un experto de Elcano presente entre el público contestó tras responder a una cuestión sobre Venezuela: "Hay populismos de izquierdas, pero también de derechas. Ahí lo dejo". No dijo si ahí incluía a Podemos, a Vox, o se unía al mensaje de estos últimos, que sitúan a Ciudadanos en el populismo al sostener que hacen lo que pide la gente. Steinberg respondió que el debate de fondo es construir una Europa que pueda funcionar como bloque frente a otros, no volver a situaciones pasadas. Ignacio Molina desarrolló unas ideas muy interesantes. Destacó que el populismo español ha mostrado una protesta local, mientras que en otros países ha sido global (Syriza en Grecia, por ejemplo, criticaba cuestiones como la globalización). El localismo de Vox, estima, puede llevar a que sus representantes, y con ellos España, tengan poca influencia, cuando su objetivo es que crezca. En este contexto, para él será interesante ver en qué bloque se encuadra Vox si logra una buena representación en las elecciones europeas. Tanto Molina como Powell recalcaron la fuerza que el PP español tiene dentro del Partido…
El PSOE ha instado al Partido Popular a que cite a Vox en la comisión sobre la financiación de partidos en el Senado, después de las noticias que apuntan que la formación que lidera Santiago Abascal fue financiada por un grupo de exiliados iraníes. El portavoz del PSOE en la comisión de investigación sobre financiación de los partidos en la Cámara Alta, Tontxu Rodríguez, afirma que "las noticias que se han publicado sobre la financiación de Vox deberían haber motivado ya la solicitud por parte del PP de la comparecencia de los ultraderechistas en la comisión de investigación. Al no hacerlo, están encubriendo a Vox", indica en un comunicado. El PSOE se pregunta "qué están encubriendo" en el PP al no solicitar esta comparecencia en una comisión en la que los socialistas no participan y que siempre han criticado por el uso partidista, dicen, que hacía el Partido Popular. Rodríguez se pregunta "qué intereses perseguía este grupo iraní para financiar a Vox" y "cómo se va a financiar este partido en las elecciones autonómicas, locales y europeas que se celebrarán el próximo mes de mayo". A su juicio, "todas estas son cuestiones de máximo interés que entran perfectamente en el marco de competencias de la comisión de investigación que monopoliza el PP en el Senado". En este sentido, el portavoz socialista recuerda que el PP ha anunciado que retomará la actividad de esta comisión el próximo 18 de enero para "ampliar" la investigación a las cuentas del PNV y el PSPV. Por último, el senador socialista afirma que "si el PP no solicita la comparecencia de Vox, se confirmará, una vez más, que no se trata de una comisión de investigación seria e imparcial, y se demostrará que es una farsa, como hemos estado denunciando los socialistas desde su creación…