Samira Brigüech es directora general en Samira & Sineb y presidenta de Fundación Adelias. Recientemente ha sido elegida como una de las 100 mujeres líderes de España. Es también especialista en Marketing y Ventas y en Relaciones Públicas. Aprovechando este reconocimiento hemos querido charlar con ella desde CAPITAL y esto es lo que nos ha contado.
¿Qué se siente al ser una de las mujeres más influyentes de este país? ¿Cómo se enteró de haber sido premiada?
Te sientes feliz sobre todo por estar rodeada de mujeres tan interesantes y comprometidas con sus carreras, sientes que formas parte de algo grande. Me dijeron que era candidata y finalmente había sido premiada porque el jurado consideraba que merecía ser una de las Top.
A pesar de los enormes avances por incorporar a la mujer al mundo laboral que se han realizado en los últimos años, ¿cuáles son los mayores retos que ahora se dibujan en el horizonte de la mujer en el mundo empresarial?
Yo creo que nos toca seguir peleando duro por conseguir reducir la brecha salarial, que consigamos una mejor conciliación laboral, que haya más hombres comprometidos con una igualdad real en todos los ámbitos. Creo que hemos conseguido muchísimo y simplemente necesitamos más recorrido y seguir peleando de forma constructiva teniendo de aliados a los hombres junto a nosotras.
¿A usted realmente le ha costado mucho esfuerzo compaginar su vida personal y familiar a la hora de sacar adelante su negocio y compaginar esta labor con el de la Fundación Adelias?
Sí, muchísimo. Soy de esas mujeres que ha sacrificado muchas horas de sueño, tiempo de ocio y que ha luchado por no ser una madre trabajadora ausente. Quiero estar presente cada día en la vida de mis hijos y a la vez quiero conseguir retos como empresaria y como líder de una ONG que hace un impacto real contra la pobreza infantil.
"Quiero estar presente cada día en la vida de mis hijos y a la vez quiero conseguir retos como empresaria"
¿Por qué motivos está usted involucrada en la labor de esta Fundación? ¿A qué se dedica la misma y qué tipo de proyectos desarrolla en Marruecos?
Porque me siento profundamente comprometida y volcada con los niños que viven en situación de pobreza, por eso decidí hace 12 años crear la Fundación. Porque yo también, de alguna manera, sufrí la pobreza en mi infancia aunque no fuera tan cruel como la que viven mis beneficiarios. La Fundación ha construido un orfanato, un colegio y ha creado la unidad de neonatatos de un hospital infantil. Creo que si sigo moviendo hilos y peleando por estos niños mi vida también mejorará de alguna manera, porque soy mucho más feliz que antes y porque dentro de mí hay un equilibrio con la vida que antes no tenía. Cada niño que operamos, cada día que medicamos y que sale adelante siento que forma parte de mi destino. Creo que todos los niños que se cruzan en mi vida y por los que puedo luchar para proveerles de educación, sanidad o alimentos justifican también mi existencia. Sé que puede sonar un poco transcendental pero es lo que siento y lo que pienso todos los días.
¿Qué consejo daría a otras mujeres que pueden estar desempeñando una magnífica labor en el seno de sus respectivas empresas y organizaciones pero que aún no han logrado esa visibilización y reconocimiento de su trabajo?
Que cada día cuenta para que construyan su futuro porque hoy es cuando pueden y deben hacerlo y eso exige sacrificios. Que hay que contar lo que hacen, sin pudor. Soy de las que piensan que si no cuentas lo que ocurre todo sucede en las sombras. Hay que ir hacia la luz.
