Asimismo, desde BBVA explicaron que “la inclusión financiera digital evita el contacto físico entre personas que acuden a la sucursal y el manejo de efectivo, y con ello la exposición a la enfermedad”.
“Con un teléfono móvil, bien a través de Internet o de una simple llamada telefónica, es posible realizar compras y ventas desde cualquier lugar, emitir transferencias, o domiciliar recibos”, aseguraron desde la entidad.
En este sentido, BBVA quiso aclarar que, “más allá de los beneficios para individuos y empresas, el uso de servicios financieros digitales es una forma de evitar la economía sumergida, que además de requerir del contacto físico entre las personas, supone un lastre para las arcas públicas, exhaustas ya por la lucha contra la pandemia”.