“Me impresiona la cantidad de empresas de gente joven que nacen cada año”
María Parejo es la pequeña de cuatro hermanos y viene de una familia grande donde siempre se ha dado importancia a la “buena mesa”. Licenciada en Derecho, pero su verdadera pasión siempre ha sido la cocina, y, en especial la repostería. Actualmente, compagina su trabajo en el obrador y gestión de Zarina con su proyecto familiar.
1. ¿Cuáles fueron los motivos que te empujaron a dar el salto al mundo emprendedor? ¿Cómo fueron los inicios?
La idea de emprender siempre ha rondado mi cabeza desde pequeña. Ya de niña soñaba con tener mi propio negocio. Pero siempre digo que fue gracias a mi amiga Bea, que me empujó a dar el salto, y a mi padre, que creyó en mí desde el principio.
Los inicios fueron bonitos, un poco complicados, ya que desconocía por completo cómo poder empezar a desarrollar este negocio. A base de informarme y hablar con mucha gente, pude empezar a crear mi gran proyecto. Día a día se aprende sobre todo de los errores y ves que el esfuerzo es la mejor recompensa. Aunque no es un camino de rosas, estuve dos años sin librar ni un día, ya que trabajaba de lunes a domingo y no tenía ninguna ayuda. Pero poco a poco el trabajo da sus frutos y ver que tu producto gusta es una satisfacción impagable.
2. Hablar de éxitos siempre es positivo y alentador. ¿Pero qué nos puede decir de los fracasos, de las caídas y de las decepciones, tan mal vistas en nuestro país?
Los fracasos y decepciones son parte de cualquier idea de emprendimiento que uno tenga, pero no quiere decir que sea una parte desalentadora. Trabajo duro y constancia vienen acompañados de éxitos y de satisfacción personal. Lo único es que siempre se ve el lado positivo y parece que, si fallas, eres un fracasado. y no es así. Se aprende a ver la vida con otros ojos cuando eres tú el que responde a título personal de tu empresa. No existe la comodidad y no sirve quedarse quieto. Hay que estar siempre innovando e intentando mejorar el modelo de negocio.
3. ¿Qué significa para ti el emprendimiento?
Para mí, es una forma de vida. Es la idea de intentar conseguir que tu producto sea el mejor y por eso te dedicas en cuerpo y alma, sacrificando muchas cosas. Pero cuando tienes pasión por algo, es más sencillo invertir horas y horas en que salga.
Supone visualizar ideas innovadoras, aceptar riesgos, salir de la zona de confort y conseguir generar futuros puestos de trabajo a pesar de todos los obstáculos que encuentran en el camino.
4. Los emprendedores encuentran decenas de trabas en este país para salir adelante. ¿Qué le pedirías a las distintas administraciones para acabar con tantas dificultades?
Somos los grandes olvidados de nuestro país, necesitamos más ayudas y sobre todo en el caso de los autónomos ya que no puedes ni ponerte enfermo…
A nivel público creo que hacen falta muchas más ayudas a las pequeñas empresas, ya que hoy en día emplean a un muy alto porcentaje de gente en nuestro país. Todas estas trabas originan que se tenga que contratar en la mayoría de los casos a un gestor que te ayude, pero obviamente supone un gasto considerable si aún no tienes unos ingresos estables. Por lo tanto, fomentan la economía sumergida.
Me encantaría que se reflexionara y se buscara una solución real para nosotros. Las trabas burocráticas y los pocos incentivos para acceder a financiación son la causa de que muchos emprendedores no pueden llegar a desarrollar su proyecto empresarial.
5. ¿Cómo valoras el ecosistema emprendedor en España en estos momentos?
Creo que estamos, por suerte, rodeados de muchísima gente con talento y ganas de comerse el mundo. Me impresiona la cantidad de empresas que nacen cada año de gente joven, que con el mercado digital han conseguido un mayor posicionamiento.
6. Fundas Zarina en el año 2011… Tartas artesanales de altísima calidad y sabor para cumpleaños, bodas, desayunos y meriendas, catering dulce y salado para Eventos de Empresas y Particulares… Háblanos sobre ello.
Zarina nació con la idea de hacer las tartas que se tomaban en las casas antes, pero que la gente había dejado de hacer por falta de tiempo. Así empecé hace 10 años y de ahí hemos ido evolucionando, mejorando el modelo de negocio y adentrándonos en el mundo de las empresas y particulares. Nuestro principal objetivo es no bajar la calidad de nuestro producto, de ahí que todo lo que hacemos sea por encargo y se entregue fresco y reciente al cliente. Además de utilizar ingredientes de primerísima calidad.
7. ¿Qué ha supuesto la pandemia para ti, tanto a nivel personal como profesional? ¿Qué has aprendido de ello?
La pandemia supuso un batacazo en un principio, ya que teníamos un local alquilado para abrir nuestra primera tienda, pero al final nos fue imposible empezar la obra, todo se retrasó y tuvimos que cancelar el contrato.
Pero, por otro lado, fueron unos meses de locura a nivel profesional, nosotros al ser un obrador con entrega a domicilio, nos permitió poder seguir trabajando. Cada mes era una locura, vendíamos más que en Navidades que es nuestro pico más alto de trabajo.
Lo mejor de todo fue poder “repartir felicidad” a través de nuestros dulces.
8. ¿Qué consejos (motivadores) darías a otros futuros emprendedores?
Lo primero, que tengan un plan de negocio bien estructurado y una vez así que se lancen, ya que, si no, siempre se quedarán con la espina de saber cómo hubiese sido. Y aunque se “fracase”, te abre a los ojos al mundo de otra manera.
Confiar en uno mismo y trabajar optimizando los recursos de los que se dispongan, porque si no, al final se trabaja de una forma poco eficiente. También recomiendo buscar ayudas y subvenciones que puedan facilitar el despegue y formar parte de asociaciones que se dediquen al sector para poder ayudarte en dudas.
