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moda española

Aniz, la firma que hace blusas de los vestidos de novia

Usar telas de vestidos de novia para hacer prendas verdaderamente únicas y duraderas. Aniz surge, así, como el contrapunto de lo rápido, desechable y perecedero. “Nos conocimos hace cinco años, trabajando en un proveedor textil. Yo trabajaba en diseño y Alex entró a trabajar en finanzas”. Habla Elena Irisarri, la mente detrás de esta marca concebida en Barcelona. “Se trataba de un gran grupo empresarial textil, donde creábamos y producíamos prendas y colecciones para todos los grandes retailers de Europa”, añade. Y ya en aquellos momentos hablaban de la idea de empezar un proyecto que se rigiera por otros parámetros que las marcas para las cuales estábamos trabajando. “Con todo lo aprendido en el sector durante estos años, teníamos la idea de crear una marca propia, pero con nuestros valores. Nos preocupaba mucho el problema de la sobreproducción, el derroche de recursos naturales y el impacto medioambiental y humano que tiene la industria de la moda”, explica Irisarri. Pasado algún tiempo, y después de mucho meditarlo se atrevieron a dar el paso. Rescatar los tejidos “No queríamos ser cómplices de los problemas que tiene la industria, sino proponer soluciones. De ahí surgió la idea de trabajar con materiales ya existentes, de esta manera podríamos crear nuestra marca reduciendo nuestro impacto al mínimo y, al mismo tiempo, aportar la novedad que demanda el mercado”, afirma. Además de esto, querían que sus materiales fueran únicos y de buena calidad, por lo que pensaron en la industria de novias. “España es uno de los países más fuertes en industria nupcial del mundo”, señala la diseñadora. Y el conocimiento de esto fue, realmente, lo que les acercó a la original idea de Aniz. Una idea, por cierto, que es lo opuesto al modo de producir generalizado. Primero, rescatar las telas. Después, diseñar. “Contactamos con…
En Malababa son forma y fondo. Zapatos, bolsos y bisutería atemporales, con un diseño pensado al milímetro y con la convicción de que las cosas tienen que estar hechas para durar. Ana Carrasco es la cofundadora, junto a Jaime Lara, de esta firma que ya ha cumplido sus 20 años, pero que sigue creciendo de forma segura en el mercado nacional e internacional. También en internet, hasta el punto en el que, durante 2020, ha habido un aumento considerable en su e-commerce de compradoras de entre 50 y 75 años. “Se han obligado a digitalizarse”, dice Carrasco. Y es que ya conocen la firma y saben que su compromiso con la calidad no se queda en promesas. “Yo no concibo hacer un Malababa que esté desvinculado de mis valores personales”, comenta la diseñadora. “No sé si a nivel empresarial esto es lo mejor, pero a nivel ser humano creo que es lo que debemos hacer todos: pensar en conjunto. Tengo claro que tenemos que dejar un mundo mejor y creo que eso se tiene que ver reflejado en nuestra forma de ser empresa”, explica, convencida de que el hecho de apostar por la perdurabilidad, la cercanía y la calidad son fundamentales para crecer de una forma fuerte y sostenible. “El concepto pasa porque el producto que consumamos mejore nuestra vida”, apunta. “Hay bolsos, por ejemplo, que son para lucirlos, pero por lo general, lo normal es que lo utilicemos sea un bolso que te hace la vida muy cómoda. Buscando la mayor utilidad posible, aunada con la estética, es como desarrollamos nuestros productos y, en concreto, tenemos un bolso cuyo diseño lleva acompañándonos muchos años porque el éxito que tiene en este sentido es indiscutible”. La historia de Malababa Malababa empezó siendo un proyecto muy pequeño que ha ido creciendo…
The Hoff Brand nació en 2015. Un momento en el que, como afirma Francisco Marchena, cofundador de la firma, el mercado de las sneakers estaba concentrado en 3 marcas y dos de ellas únicamente ofrecían zapatillas blancas. “Identificamos una oportunidad para marcas con más personalidad, más distintas, y que mucha gente demandaba más autenticidad en los diseños”, dice. Esa fue la primera premisa con la que se sumergieron en el proyecto. La segunda, la necesidad que tenían –y tienen– de contar historias. “Ya no valía que el nombre del modelo fuera una referencia, por eso decidimos serigrafiar las suelas con nombres e imágenes de ciudades convirtiéndose en nuestra seña de identidad”, explica Marchena. Si bien el punto de partida de esa “diferencia” es la suela transparente inspirada en los lugares icónicos del mundo, con una combinación equilibrada, única y reconocible de colores, materiales, creatividad y diseño, si hay algo que gusta en The Hoff Brand es compartir mensajes optimistas. “Nuestros diseños están llenos de vida, son alegres y muy equilibrados a pesar de su contraste entre colores”, señala Marchena, subrayando que esa alegría la han querido transmitir también en su modo de expresarse en la comunicación de la firma. Zapatillas y el arte de Miranda Makaroff “Asimismo, nos gusta ser muy honestos. Estamos contentos con nuestra forma de ser y queremos causar un impacto positivo en la medida de lo posible. Nuestro objetivo es transmitir mensajes que tengan sentido y hagan reflexionar. No ser un simple espectador o una marca que sólo te muestra un producto”, asevera. Ejemplo de ello es la colección especial que la firma ha desarrollado con la diseñadora Miranda Makaroff, ‘Art’, llena de color y con una combinación de materiales que la hace verdaderamente especial. Además, ha sido una de esas pocas marcas a las que…
Vestir a una mujer que segura de sí misma. La fuerza, un tanto imperecedera, que queda cuando no importan las opiniones externas. Así es Hinsomnia, una marca que nació cuando su fundadora, Blanca Molina, detectó un problema que, realmente, han vivido muchas mujeres a la hora de encontrar un vestido especial para un evento o una fiesta. “Existían pocas marcas diferenciadas y a un precio razonable que te permitieran no presentarte en un evento con los mismos vestidos que otra invitada”, dice Javier García de la Calera, CEO y cofundador de la marca. Además, Hinsomnia está concienciada con el medio ambiente: no solo se trata de crear prendas únicas, sino que estas se hacen bajo un modelo de producción diferente en el que se elimina el stock y se confeccionan los vestidos a petición de las clientas, de una en una y de forma artesanal, aunando el buen hacer de crear empleo sostenible y justo, con materiales de máxima calidad para crear un tipo de lujo “honesto y sencillo”. “Blanca es una RRPP de manual y se apoya en un equipo de personas que la ayudan a organizar el e-commerce y la producción, y parece que la propuesta marcha”, añade García de la Calera. Sin embargo, en un momento como el que vivimos, en el que los eventos llevan un tiempo siendo muy limitados, ¿hay espacio para salir fortalecidos? La respuesta es que sí. “Los primeros momentos de la pandemia fueron muy complicados, allá por el 10 de marzo de 2020”, recuerda el CEO de la firma. “Todo se para, todo se cancela... se podría haber escrito un libro con los poemas de nuestras caras”. Fue un momento de shock que solo duró dos semanas. “Hicimos un Zoom entre los socios, nos secamos las lágrimas y decidimos crear el mejor…
Los bolsos de Utopian Dreamers nacieron gracias a un sentimiento de enorme pasión hacia el diseño, la moda y la artesanía, de la mano de su fundadora, Elena Morales. Desde muy joven, sentía una gran necesidad de crear y compartir aquello que le gusta. “Tenía claro que quería llevar a cabo un proyecto que aunase una serie de valores donde primase la ética profesional y donde pudiese expresarme a nivel creativo”, dice. “Un buen día decidí que era el momento de dar el salto, y, como parecía un sueño imposible, decidí darle este nombre. Me gusta pensar que, con esfuerzo, dedicación, trabajo y perseverancia todo es posible y esa, ni más ni menos, con más o menos suerte, ha sido la forma que me ha llevado a estar donde estoy”, explica Morales. Esta firma española apuesta por una producción 100% española, en la que todos los materiales utilizados en la producción son elaborados en nuestro país, y sus talleres se encuentran en diferentes lugares de la Península, dependiendo de la especialidad artesana de cada zona. “Creemos en la recuperación y revalorización del trabajo artesano”, subraya Morales. Bolsos llenos de color Por otra parte, sus productos se caracterizan por la excelencia de sus materiales, un diseño limpio, elegante y femenino, la atención a los detalles, y el uso del color como gran protagonista. “El color es una de mis grandes pasiones. Lo considero una gran fuente de inspiración y una forma de expresión”, explica Morales. “Creo que la manera en la que cada persona juega con el color es algo único y en ocasiones puede convertiste en un potente sello de identidad”, añade. De hecho, sus paletas de color son el ADN de cada colección. “A través de ellas intento transmitir su razón de ser y contar su historia. Es lo…
Lara Herranz y Carlos Martínez son los creadores de Idawen, uno de esos proyectos que comienzan siendo una mezcla de casualidad y compromiso, y que abren el camino hacia algo innovador: la ropa deportiva sostenible. Todo comenzó en 2014, cuando 88 ambos continuaban en sus respectivos trabajos en los mundos de la tecnología y la empresa, y cuando, además, ambos estaban muy implicados con sus respectivos deportes. Él, kitesurf; ella, pádel. La casualidad llegó cuando ambos colaboraron con un proyecto de bolsos hechos a partir de lonas publicitarias recicladas. “Ahí nos metimos de lleno en el mundo del reciclaje y la sostenibilidad y empezó a nacer la idea de llevarlo al deporte y la moda, que eran nuestras otras pasiones”, explican. Este compromiso con la sostenibilidad les llevó a querer hacer algo diferente, con un diseño reconocible, pero “que plasmara el conocimiento y la tradición textil que existe en España y lo bien que se pueden hacer aquí las cosas”. Y, por supuesto, que fuera además de producción ética, totalmente sostenible. En 2015 dieron el paso y nació Idawen, después de mucho tiempo buscando materiales y tecnologías de estampación que les llevaron a lanzar su primera colección de bolsería deportiva orientada principalmente a deportes de raqueta. Y, en 2018, a su primera colección textil. Ropa deportiva diferente Ahora destacan, además, por unos diseños diferentes que el mercado nacional e internacional ha acogido de forma muy positiva, sobre todo en una época en la que la práctica del deporte está cada vez más ligada a la vida de las personas. “Ha sido muy evidente en los últimos años cómo la práctica de deporte se ha incrementado, porque forma parte de una cultura del healthy-life. Además, la moda se ha vuelto más sporty, incorporando prendas deportivas a la ropa de calle”. Sin…
Las mujeres están llamadas a tomar el relevo en la industria textil española. El ejemplo más claro lo encontramos en la firma Adolfo Domínguez, liderada por su primogénita, Adriana Domínguez, directora general y CEO de la compañía gallega. Sigue sus pasos Cristina Mariño, hija del modisto Roberto Verino. Mientras tanto, Marta Ortega no se cierra puertas en Inditex... El relevo generacional familiar ya está aquí (y parece que el modelo funciona). El cambio generacional de la industria textil española, todo un reto Según el informe ‘La empresa familiar en España’, elaborado por el Instituto de la Empresa Familiar, se estima que el 88,8 % de las empresas de nuestro país son de origen familiar, un porcentaje que, en Galicia, en concreto, se eleva hasta el 92,4 %. Marta Ortega se enfrenta, junto con Adriana Domínguez y Cristina Mariño, a un cambio de ciclo. Las tres pertenecen a una nueva generación que aspira a tomar el mando de la industria textil española. Marta Ortega, el arma secreta de Zara El exponente más claro lo encontramos en Inditex. “Estaré allí donde la empresa me necesite”, ha asegurado la hija pequeña de Amancio Ortega en su primera entrevista pública a The Wall Street Journal, donde ha revelado algunas de las claves del éxito de la multinacional gallega. En sus declaraciones, Marta Ortega Pérez reivindica su presencia en el área creativa de la empresa, dejando entrever que está llamada a ganar peso en el grupo en el que lleva trabajando 14 años. Además, no descarta asumir mayores responsabilidades en Inditex: “Nunca sabes cuál será tu futuro, pero estoy abierta a él”. Calificada en la portada del diario estadounidense como “el arma secreta de Zara”, Ortega presenta una declaración de intenciones que podría servirle para posicionarse como heredera de este imperio dentro de la industria…
Clemente y Álvaro Cebrián (1974 y 1975). Estudiantes de empresariales en CUNEF, desde jóvenes se interesan por el mundo de la moda. Es en el año 2004 cuando deciden juntar sus ahorros y se lanzan a la aventura. Nace “El Ganso”, con el objetivo de crear un estilo de vida para todos e ir más allá. Con una primera tienda en la calle Fuencarral de Madrid, inician un sueño que a día de hoy es toda una realidad. Una marca con ADN propio, que cuida especialmente los detalles, con precio asequible y que en la actualidad tiene colecciones para hombre, mujer y niños. En 2015 L Catterton, fondo de inversión de Louis Vuitton, adquirió el 49% del capital. Sin embargo, hace tres años, en un momento muy complejo y de estancamiento de la empresa, la familia Cebrián recompró la totalidad de las acciones. Hoy, El Ganso tiene 155 puntos de venta, incluidos “corners” en El Corte Inglés, presencia física internacional en cinco países (Francia, Portugal, Chile, Méjico y Kuwait) y una previsión de ventas en el 2021 en torno a 60 millones de euros. Desde el 2020, El Ganso suministra a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) las prendas de calle de los futbolistas de la Roja. Además, El Ganso ha obtenido la licencia de la marca Selección Española para lanzar una colección de prendas de vestir que distribuirá en sus puntos de venta. ¿Cómo son los inicios de El Ganso? Clemente Cebrián (C.C.): La historia de “El Ganso” comienza en el 2004. Álvaro trabajaba en una marca de accesorios y yo trabajaba en Movistar. En un momento determinado, vimos que había una oportunidad, un nicho de mercado en ropa especialmente de hombre. Sin saber mucho de ello, nos lanzamos y nos apuntamos en la Asociación de Jóvenes Empresarios de Madrid.…
Victoria Prada daba sus primeros pasos como diseñadora cuando Ana Patricia Botín se enamoró de una de sus prendas y de su filosofía de negocio. Desde entonces, la joven empresaria ha visto cómo su marca de moda slow fashion se ha dado a conocer en toda España. Su firma homónima, Victoria Prada Collection, trabaja con artesanos de distintos países del mundo para confeccionar sus prendas con materiales naturales y hechos a mano.  Empecemos hablando de tus comienzos. ¿Cómo entras en el mundo de la moda y en qué momento decides dar el salto y fundar Victoria Prada Collection? Desde pequeña la moda ha sido un mundo que me ha fascinado. Era muy observadora, me encantaba dibujar, acudir a clases de pintura… todo en mi vida estaba ligado de alguna manera al sector. Cuando finalicé mis estudios de Bachillerato decidí irme a Milán y estuve tres años estudiando Fashion Styling en el Instituto Marangoni. Durante ese tiempo, esa parte creativa que siempre me había acompañado fue calando en mí y el espíritu empresarial llamó a mi puerta.  En mi último año de carrera comprendí que quería abrir un negocio ligado a la artesanía y los procesos hechos a mano. A mí me encanta viajar y empaparme de la cultura de la zona, observar sus costumbres, conocer sus mercados… de ahí la idea de crear una comunidad de artesanos con la que poder trabajar. Además, como no quería dar un problema más al mundo, tenía muy claro que buscaba crear algo sostenible y ecológico. En 2018 hice las maletas y me fui de viaje a Colombia, donde conocí a los primeros artesanos y un año después abrí mi oficina en Madrid bajo el nombre Victoria Prada Collection. ¿Cómo definirías tu firma y el estilo de la misma? ¿Cuál dirías que es el…
La hija mayor de Adolfo Domínguez, Adriana, cogió el timón de la empresa hace dos años y medio. Tras dieciséis temporadas en la compañía, percibió el peligro de una nave a la deriva y se postuló para sacarla a flote. Treinta meses después de aquello, las cosas van bastante bien. La rompedora firma de moda gallega perdió en 2018 6,7 millones de euros, un 70% menos que en el año anterior. En el primer trimestre de este año, su resultado operativo ya fue positivo. La clave para la remontada ha sido “una buena cantera”; una plantilla que conocía muy bien la casa y que empezó a correr desde el primer minuto para dejar atrás cuanto antes los números rojos. La líder de esta revolución nos lo explica con más detalle. ¿Fue difícil aceptar el reto? No fue fácil, pero tampoco muy difícil. Ocurrió como cuando tu padre o tu madre están en dificultades: instintivamente, les ayudas. Pensé en lo que necesitaba el proyecto, no en lo que me convenía. La empresa es como mi familia. Aunque no es plenamente familiar, la hemos visto en casa desde siempre. Son muchos años de aprendizaje de valores y de cultura empresarial. Somos una saga empresarial, desde el taller que tenían mis abuelos, a la empresa que creó mi padre y en la que estamos, mis tíos, mis primas con Bimba y Lola… Mi familia disfruta trabajando, y eso hace que empleemos muchas horas en algo que nos gusta. ¿Qué valores piensa que ha heredado en mayor medida de su padre? La tenacidad es propia de las empresas familiares. Todos tenemos altos, bajos, vueltas a subir… La razón nos lleva a pensar que algo puede remontarse, como nos ocurría a nosotros en aquel momento. ¿Veía los fallos antes de llegar a su cargo? Sí.…