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sostenibilidad

Repsol invierte 100 millones de euros para ayudar a la reforestación y el empleo rural

La petroquímica pretende reforestar hasta 24.000 hectáreas en cinco años Repsol, a través de su fundación, se ha aliado a Potobello Capital y Crédit Agricole Indosuez WM para lanzar un nuevo Fondo ESG (ambiental, social y de gobierno corporativo) de Carbono, dotado con 100 millones de euros y que supone la mayor iniciativa de inversión ESG en España para impulsar la reforestación a gran escala contra el cambio climático. Este proyecto se enmarca en la iniciativa de la fundación de la energética 'Motor Verde' para impulsar el desarrollo de proyectos de reforestación y la creación de empleo en áreas rurales. En la presentación del fondo, en la cual ha estado Europa Press, el presidente de Repsol, Antonio Brufau, señaló que se trata de un proyecto "muy ilusionante, que sí o sí va a tener éxito" y en el que "multitud de compañías e inversores privados van a participar". "Va a ser el primer paso para avanzar en el camino de la descarbonización, tan necesario en este planeta", subrayó el directivo. En concreto, el proyecto del fondo, con esa inversión de 100 millones de euros, contempla la reforestación de más de 24.000 hectáreas en los próximos cinco años, con la plantación de unos 20 millones de árboles, lo que significa la reducción de unos seis millones de toneladas de CO2. Además, generará la creación de puestos de trabajo en zonas rurales, incorporando a personas con dificultades de acceso al trabajo, y estará respaldado por la tecnología de Hispasat, socio de 'Motor Verde', que "permitirá a estas zonas tener acceso digital a la comunicación", señaló Brufau. Motor Verde 'Motor Verde' es una iniciativa de Fundación Repsol que apuesta por la creación de bosques, reforestando las tierras quemadas o baldías en España para impulsar la compensación de emisiones de CO2. El proyecto está…
“El impacto que genera la rentabilidad no financiera contribuye a cerrar deficiencias o desigualdades en diferentes ámbitos” La sostenibilidad: el ‘driver’ de las inversiones En estos momentos no se entiende el buen funcionamiento de una economía sin la integración de la sostenibilidad. La Unión Europea se posiciona con un reglamento que pretende establecer un marco para favorecer la inversión sostenible en las tres dimensiones que se describen en la Agenda 2030 de las Naciones Unidas. La conducta frente a lo medioambiental, las perspectivas sociales y la gobernanza se convierten en nuevos pilares a tener en cuenta en la toma de decisión de inversión, tanto en empresas consolidadas como en aquellas de nueva generación. Así las cosas, el inversor se establece no solo como financiador del futuro crecimiento económico, sino también en participe de la transformación económica.  Para un empresario o emprendedor, lo sostenible se puede manifestar de manera directa de distintas formas: lograr unas cadenas de suministro resistentes a contratiempos, colaborar con fuentes de energías alternativas limpias, ofrecer igualdad de oportunidades y condiciones de trabajo justas. De manera indirecta se manifiesta con el cambio climático, con cambios de hábitos de los consumidores y en el aumento de la presión regulatoria.  Christian Dürr, socio director de Ética Patrimonios EAF Los gestores de inversión tienen por tanto la responsabilidad de tener en cuenta todos estos elementos en el análisis y su integración en el proceso de selección de los activos. Además, deben contribuir a mejorar la coordinación entre emisores e inversores. El proceso de selección también es clave para acercar al inversor a la consciencia sostenible. Pero hay demasiados productos que llevan el nombre ‘sostenible’ y, por tanto, mucho campo por mejorar para seleccionar bien.  Habitualmente se consultan rankings y se seleccionan, en la mayoría de casos, valores de sectores que en…
La normativa europea se está endureciendo para obligar a las empresas a demostrar que su sostenibilidad y evitar el ‘blanqueo ecológico’ Para ser ético y sostenible ya no basta solo con decirlo. En la Unión Europea (UE) en especial —y en el mundo en general— están cambiando las normas para que la actividad empresarial esté realmente en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU. Un ejemplo de ello es la taxonomía verde Europa, puesta en marcha este año, que obligará a las empresas a presentar unos indicadores económicos de sus actividades sostenibles para evitar el greenwashing o ‘blanqueo ecológico’. Ser sostenible. Este es el objetivo que para muchas empresas no solo es una opción, sino una realidad. Más si cabe después de que la Comisión Europea haya establecido la incorporación de esta taxonomía medioambiental al tejido empresarial con el fin de conocer quiénes realmente cumplen con los fines sostenibles y quienes las citaron como papel mojado. Para las empresas que quieren liderar el cambio, las nuevas regulaciones suponen un gran reto técnico y administrativo. Así lo ha hecho ver la consultora tecnológica Stratesys, que ha señalado como seis las soluciones disponibles responden a los siguientes retos: 1. Cálculo de huella de carbono: Además de calcularse para las organizaciones, se puede calcular para productos y servicios específicos, siempre tomando como base los estándares internacionales (GHG Protocol, PAS 2050, etc.). Además de publicar la información del cálculo, el objetivo principal es la obtención de una etiqueta ecológica europea del producto (ecoetiqueta). 2. Compliance con la taxonomía europea: un Reglamento que nace del Plan de acción de finanzas sostenibles y cuyo objetivo es definir, en base a una clasificación homogénea y común, que actividades económicas son consideradas como actividades económicamente sostenibles. Afecta de manera diferente a las empresas que prestan servicios financieros frente…
De acuerdo a un estudio de The Harris Poll para Google Cloud, dos tercios de los directivos afirman que nadie sabe cómo ser más sostenible en el mundo empresarial El 72% de los directivos considera que existe la "hipocresía verde" en las empresas. Así, dos tercios de los directivos consultados también señalan que pese a que "todo el mundo quiere ser más sostenible, nadie sabe bien cómo hacerlo" y un 59% se cuestiona si las iniciativas de su organización genuinas, como explica Europa Press. No obstante, el informe constata que un 92% de los encuestados se preocupa más que hace un año por la sostenibilidad, aunque el 86% cree que es más "una idea" que "un objetivo prioritario". Pese a ello, un 97% de los ejecutivos españoles planea implementar una estrategia de sostenibilidad o ya la ha puesto en marcha. De estos, algo más de un tercio (36%) está en la fase de establecer objetivos, un 25% cuenta con un programa que además mide y un 21% cuenta con un programa. Entre las medidas tomadas, destacan las políticas de oficina sostenible (53%), reducción de consumo energético (51%), diseño sostenible de productos (495) y programas de reciclaje (47%). Así, más de la mitad también han destacado la importancia de la tecnología para desarrollar nuevos productos y servicios.
A partir de enero de 2023 las empresas de determinadas características deberán informar de sus actividades sostenibles como si de una auditoría se tratase Ser sostenible. Este es el objetivo que para muchas empresas no solo es una opción, sino una realidad. Más si cabe después de que la Comisión Europea haya establecido la incorporación de la taxonomía medioambiental al tejido empresarial con el fin de conocer quiénes realmente cumplen con los fines sostenibles y quienes las citaron como papel mojado. ¿Qué hay que hacer para solicitarla? ¿Acaso una empresa puede ser multada en el caso de no tenerla? Y, en definitiva, ¿de qué se trata esta ‘taxonomía’?   “Para poder entenderlo hay que tener en cuenta que ahora mismo hay dos reglamentos en materia sostenible europea. Uno es el relativo al objetivo a medio plazo entre 2030 y 2050 que tiende a la descarbonización de la economía, a luchar contra el cambio climático y a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero”, apunta en primera instancia Tomás Garicano, Senior Advisor de Atrevia y conocedor de los últimos cambios legislativos comunitarios en materia sostenible. El segundo y que más vinculado está con la nueva taxonomía, “el criterio para saber si una actividad se considera medioambientalmente sostenible”. Para ello, apunta el experto, “Europa lo que busca es saber si las actividades de una empresa son elegibles, es decir, si están incluidas dentro de una clasificación que hace esta normativa porque se entiende que dicha compañía contribuye sustancialmente a alguno de los objetivos medioambientales”. ¿Cómo puede afectar esta novedad al empresario? Este 2022 tendrá que comenzar a recabar información y a “tener en cuenta lo que son las ventas elegibles y los gastos operativos elegibles. Para ello tendrá que ir a sus cuentas de ventas, de contabilidad, y delimitar cuáles de…
Cada vez son más las personas que solicitan que las entidades públicas y privadas colaboren en pro de la sostenibilidad La sostenibilidad es uno de los grandes retos para el que empresas e instituciones ya están incrementando esfuerzos. Y es que le futuro del planeta y de la propia población ya no es una preocupación ajena, sino que cada vez son más las personas que solicitan que las entidades públicas y privadas colaboren para solucionar un problema que afecta a todos. Así se ha remarcado este pasado martes 22 de febrero en el evento Retos y Oportunidades para un Futuro Sostenible organizado por Impact Hub en Madrid al que han acudido rostros como el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, quien ha remarcado que la transición ecológica “será la gran oportunidad para la recuperación y crecimiento en España”, tanto en 2022 como en los siguientes. "En la actualidad los programas educativos son muy diferentes a los de hace dos o tres generaciones, pero el problema es que no podemos esperar dos o tres generaciones más para un nuevo cambio", ha apuntado Morán en referencia a la necesidad de actuar en tiempo presente, ya que para él no se puede "seguir esta deriva” y “es importante interiorizar que en este proceso de transición no se ha de reconstruir el pasado, sino construir un nuevo futuro, identificando las oportunidades que pueden surgir en cada ámbito". Y ahí reside la importancia de la educación y concienciación en las nuevas generaciones. Por ello, Morán ha defendido la urgente colaboración entre las entidades publicas y privadas para “alejarnos de un pasado que ha usado los recursos al límite”. La cuestión en este punto es cómo empezar, pero para el secretario de Estado de Medio Ambiente existe un factor clave con el que antes…
Por Estefanía Campos, Directora en Estudio de Comunicación No hay duda de que las grandes empresas del país están en gran medida comprometidas con la sostenibilidad dese hace años. Ya son muchas las que han ido pasando del discurso a la acción de manera paulatina y cada vez más ambiciosa, con una misión integrada en la estrategia del negocio, con unos objetivos alineados con el impacto que cada una tiene sobre la sociedad y el medioambiente y con kpis que les permiten medir sus progresos y seguir avanzando en su posición de ser buenos ciudadanos corporativos. Ello va más allá de la sola obtención de determinados resultados económicos. Podemos estar contentos, porque nuestras grandes empresas se preocupan, cada día más, por contribuir a crear futuro mejor. Pero, pese a las buenas prácticas que están mostrando, considero que aún tienen un importante reto que abordar. Según un importante reto que abordar. Según recientes estudios de la Red Española de Pacto Mundial de las Naciones Unidas, existe un importante gap entre el compromiso de las grandes corporaciones y el de las pequeñas y medianas empresas (pymes) del país. Las pymes tienen un peso fundamental en la economía. En España, suponen el 99,9% del tejido empresarial español, son las responsables del 66% del empleo total y representan alrededor del 62% del PIB Nacional. Teniendo en cuenta estas cifras, su impacto e influencia sobre la sociedad y el entorno son indiscutibles, y, seguramente, mucho mayor que el de las grandes. Por eso, la involucración de las pymes en la búsqueda de la sostenibilidad o, al contrario, su despreocupación al respecto, es un factor verdaderamente decisivo a la hora de avanzar en la Agenda 2030. Considerando que las pymes no cuentan con recursos equivalentes y no están sometidas a las mismas exigencias ni a la…
El 92% de los encuestados por EY afirma haber invertido basándose en los potenciales beneficios de una “recuperación verde” La pandemia ha aumentado el interés de los inversores institucionales en el análisis de la información corporativa sobre factores medioambientales, sociales y de gobierno corporativo (ESG por sus siglas en inglés), según apunta EY en la sexta edición del informe Global Institutional Investors Survey 2021. De hecho, el 74% se muestra ahora dispuesto a desinvertir en empresas con un historial ESG deficiente mientras urgen a mejorar la calidad de la información aportada por las compañías. En esta encuesta, en la que han participado 320 inversores institucionales procedentes de 19 países, el 90% de los encuestados aseguran que ahora tienen mucho más en cuenta los factores ESG en sus decisiones de inversión que antes de la pandemia y una gran mayoría (92%) afirma que en los últimos doce meses han realizado inversiones basándose en los potenciales beneficios de una “recuperación verde”. “La pandemia ha sido un catalizador para integrar aun más las variables medioambientales, sociales y de gobierno corporativo en la toma de decisiones de los inversores y en estrategia de las empresas. Sin embargo, sigue existiendo preocupación por la transparencia y la calidad de la información corporativa. Por ello es necesario y urgente la concreción de un entorno regulatorio más claro, con estándares globales consistentes que puedan seguir tanto inversores como empresas”, explica Alberto Castilla, Socio responsable de Sostenibilidad de EY. Importancia de los riesgos ESG Entre la mayoría de los inversores hay una intención clara de aumentar la importancia de los riesgos ESG en todas sus carteras y planes de inversión en el futuro. Más de tres cuartas partes (77%) de los encuestados informan de que, en los próximos dos años, planean intensificar su análisis de riesgos "físicos" ­-es decir,…
La pandemia ha dejado su huella en todos los aspectos del mundo empresarial. Y, como era de esperar, también ha ralentizado el crecimiento del compromiso de las empresas del IBEX 35 con el desarrollo sostenible. Así se desprende del estudio “Comunicando el Progreso 2021: el reporting empresarial como instrumento para una recuperación sostenible”, elaborado, un año más, por el Pacto Mundial de Naciones Unidas España. Este documento analiza los avances reportados por las entidades adheridas a la iniciativa en España respecto a la integración de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y los derechos humanos, el medioambiente y la lucha contra la corrupción, agrupados bajo los Diez Principios del Pacto Mundial. Además, se analizan de forma exhaustiva las memorias de sostenibilidad publicadas por las empresas que formaron parte del IBEX 35 durante 2021. Según apunta el estudio, las empresas del IBEX 35 el compromiso con la Agenda 2030 es reportado por 32 de las 35 empresas que forman parte del índice bursátil. Además, el 43% de sus CEOs han manifestado públicamente su compromiso. No obstante, en comparación con los datos del ejercicio anterior resulta "evidente que la pandemia ha ralentizado el ritmo de la implementación de medidas al respecto". En este sentido, el establecimiento de compromisos y objetivos cuantificables por parte de estas empresas ha descendido el último año de un 49% a un 37%. Por otro lado, entre los indicadores que recogen un mayor crecimiento se encuentra la formación a empleados en desarrollo sostenible, que ha pasado del 3 al 14%, aunque, según señala Pacto Mundial, "sigue siendo un aspecto a mejorar". En cuanto a los ODS más trabajados por el IBEX 35, destacan el ODS 13 de acción por el clima, el ODS 8 sobre crecimiento económico y trabajo decente y el ODS 9 de industria, innovación e infraestructuras. Sin embargo,…
Nespresso contribuye a mejorar la experiencia cafetera en las oficinas con 16 variedades de café y una amplia gama de máquinas profesionales Si en algo ha coincidido la sociedad a lo largo de la historia es que, para tener un buen despertar y empezar con energía la mañana, es necesario un buen café. Pero, con el ritmo frenético del día a día, la realidad es que cada vez es más común llegar a la oficina deseando tomar el primero de la jornada cerca del puesto de trabajo. Los cambios en el estilo de vida y las nuevas necesidades de los clientes llevaron a la compañía Nespresso a introducir en 1996 Nespresso Professional, que ofrece soluciones B2B prácticas y adaptadas a las necesidades de cada empresa o negocio, ya sean oficinas, hoteles, restaurantes o cafeterías. Así, la firma ofrece 16 variedades de cafés, con multitud de aromas y matices, y una amplia gama de máquinas de café profesionales Nespresso. Un café para cada persona Existe una amplia gama de variedades de café para satisfacer todo tipo de paladares, ya sea para tomar solo, con leche o en formato receta. De hecho, cada vez son más los consumidores que eligen beber café con leche. En concreto, cuatro de cada diez se decantan por esta opción, mientras que el 34% consume una mezcla entre el café negro y en café con leche. Teniendo en cuenta que gran parte de los consumidores prefiere combinarlo con leche, Nespresso Professional ha añadido a su gama Creations las nuevas variedades Bianco Delicato (con notas de caramelo y galleta) y Bianco Intenso (con notas de cereales y frutos secos), creadas especialmente para tomar con leche. De este modo, tanto empleados como clientes podrán disfrutar de esta nueva experiencia de degustación. Para los amantes de las creaciones con leche un poco…