La presidenta de la Asociación Española de Banca (AEB), Alejandra Kindelán, ha expresado su preocupación sobre el impacto del impuesto extraordinario a la banca, señalando que estigmatiza al sector financiero, tratándolo como si generara “externalidades negativas” para la economía. Durante su intervención en el 31 Encuentro del Sector Financiero, organizado por ABC y Deloitte, Kindelán instó a los miembros de la Comisión de Hacienda del Congreso, que revisarán la enmienda sobre este impuesto, a adoptar una visión a largo plazo y considerar el papel esencial de la banca en la financiación de familias y empresas, en lugar de priorizar la recaudación inmediata.
Criticó la falta de consulta pública por parte del Gobierno respecto a este impuesto, cuya extensión y graduación podría aplicarse durante los próximos tres años. También mencionó que, aunque el impuesto fue anunciado en un contexto de alza de tipos de interés en 2022, el Banco Central Europeo (BCE) está actualmente bajándolos, lo que crea un nuevo entorno financiero. Kindelán también advirtió que factores como la elección de Donald Trump en EE. UU. y el aumento de las necesidades de financiación en Europa agravan la incertidumbre, haciendo que el impuesto suponga un “lastre” en un momento delicado.
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Por otro lado, Manuel Illueca, presidente del Instituto de Crédito Oficial (ICO), compartió dos puntos de vista sobre el impuesto: primero, que su diseño ha sido modificado para reducir su efecto procíclico, es decir, para que grave más en épocas de bonanza y menos en crisis. Segundo, reconoció la necesidad de recaudación, pero subrayó la importancia de mantener la cooperación con el sector bancario, destacando que la banca ha sido un socio clave en momentos críticos como la crisis de la COVID-19 y la reciente DANA que afectó a España.
Tanto Illueca como Kindelán, o como el director general de CECA, José María Méndez, quien compartía mesa con el presidente del ICO y la presidenta de la AEB, han transmitido sus condolencias por lo sucedido en la DANA y han resaltado la importancia de la colaboración público-privada para ayudar a los afectados.
Illueca ha resaltado que no hay reconstrucción si no hay liquidez. "Cuanto antes llega, antes podemos empezar", ha señalado, antes de recordar que se ha habilitado una línea de avales ICO por la DANA que tiene tres modalidades y que, por primera vez, la entidad concederá avales a particulares, además de a empresas, que ya pudieron acogerse a las líneas de avales por el Covid-19.
"Una única operación de financiación a la familia puede anticipar la indemnización del Consorcio de Compensación de Seguros y las ayudas que podrían recibir por las distintas convocatorias que irán saliendo", ha afirmado.
Por su parte, Méndez ha destacado la "magnífica labor" del Consorcio, al que contribuyen todas las aseguradoras, al tiempo que también ha puesto en valor la colaboración pública-privada en materia de inclusión financiera.
