El vicepresidente de la RFEF habla con Capital antes del inicio del Mundial Femenino para analizar la situación actual de la selección, su evolución y próximos retos
La selección española femenina y, en general, todo el fútbol femenino está viviendo la mayor evolución de su historia en España en este último lustro. Rafael Del Amo Arizu ha vivido en primera línea esta transformación, como vicepresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y presidente del Comité Técnico del Fútbol Femenino, cargos a los que se suma su cargo de presidente de la Federación Navarra de Fútbol.
En el escenario de la celebración del Mundial, Rafael del Amo conversa con Capital para analizar la situación actual de la selección, su evolución y próximos retos.
El fútbol femenino vive una fase de expansión y crecimiento profesional, pero aún continúan las quejas respecto a las diferencias salariales o los derechos audiovisuales. ¿Qué balance hace de la situación actual de este deporte y su evolución en los últimos años? ¿Nos queda mucho por mejorar?
He podido ver en primera persona la transformación del fútbol femenino en España. Dónde estábamos y donde estamos. En 2018, con la entrada de Luis Rubiales, comenzó el cambio en todos los órdenes. Competiciones y selecciones nacionales han experimentado una profunda metamorfosis y esto se debe a una apuesta decidida del presidente por potenciar este campo. Hay un dato que resuelve todas las dudas: antes de la llegada de Rubiales, la Federación destinaba al fútbol femenino tres millones de euros. A día de hoy, la inversión ronda los 25.
2022 supuso un año de consagración para el fútbol femenino español, mostrando el gran futuro que se avecina para la Roja con dos oros Mundiales (el sub-17 y el sub-20), oro en el Europeo sub-19, y plata en el Europeo sub-17. ¿Qué objetivos se pone la RFEF para este 2023?
Nuestro objetivo es seguir creciendo. Creemos en la formación, hemos invertido en medios y recursos para las jugadoras y eso está dando sus frutos. Somos una referencia mundial en categorías inferiores, con unos resultados históricos que son fruto del trabajo y de la apuesta decidida por desarrollar este deporte. Acabamos de ser subcampeonas de Europa sub 17 y tenemos por delante un Mundial Absoluto en Australia y Nueva Zelanda que nos genera mucha ilusión. De los últimos cuatro mundiales de categorías inferiores, hemos conseguido tres oros y una plata y de los últimos cinco campeonatos europeos, tres oros y dos platas.
La gran cita de este año es el Mundial de Australia/Nueva Zelanda que dará comienzo a finales de julio. ¿Qué supone para una selección nacional poder participar en el mayor evento futbolístico existente?
Es un honor y una gran responsabilidad. Representamos a un gran país que es una referencia futbolística a nivel mundial donde el fútbol femenino no para de crecer. Es una gran oportunidad para medirnos y ver en qué punto estamos ante un evento de semejante magnitud.
Este año, la Copa se traslada a Oceanía. ¿Cómo se prepara al RFEF para este evento? ¿Qué periodo de tiempo lleva la preparación de todo el dispositivo, organización del equipo humano asistente...?
Destinamos los mismos recursos para la femenina que para la masculina. La orden del presidente es clara en este sentido: a las jugadoras no les debe faltar de nada. Además, hemos hecho una inversión extra para llevar a cabo la concentración que ha solicitado el seleccionador y para combatir el jet lag con las herramientas que hoy ofrece el mercado una vez que las jugadoras vuelen a Oceanía.
En términos económicos, y conociendo los importes que reciben las selecciones participantes en función del puesto de clasificación en el que finalicen el Mundial. ¿Es rentable para una selección acudir a este evento? ¿Supone una experiencia positiva en términos económicos?
Es estos momentos no debemos fijarnos es cuestiones económicas. Nos importa invertir para que los equipos sigan progresando porque nos interesa el futuro, pero también el presente. No nos condicionan los premios, creemos en el fútbol femenino y daremos lo mejor de nosotros para que jugadoras y técnicos tengan los mejores recursos a su alcance. Podemos pensar así gracias a la política económica de Luis Rubiales, que ha llevado en cinco años a la federación de 145 a 400 millones de euros de presupuesto, y la ha colocado segunda con más ingresos del mundo.
¿Qué les diría a las personas que no ven fútbol femenino por considerarlo de peor nivel respecto al masculino?
Trabajamos convencidos de que los prejuicios y ese tipo de barreras van a desaparecer. Invitamos a los aficionados a que vean fútbol femenino y lo hagan en directo. El que no lo ha hecho, se quedará gratamente sorprendido y repetirá.
“Destinamos los mismos recursos para la selección femenina que para la masculina”
Rafael Del Amo Arizu, vicepresidente de la Real Federación Española de Fútbol
España, junto con Portugal y Marruecos, ha presentado su candidatura conjunta como sede del Mundial 2030 teniendo como rival a la candidatura también conjunta de Argentina, Uruguay, Paraguay y Chile. ¿Qué opciones ve usted para la candidatura española en esta disputa? ¿Qué factores cree que decantarán la balanza en la elección?
La Federación ha hecho un trabajo silencioso y muy valioso. Este es un proyecto personal de Luis Rubiales y Fernando Gomes, presidente de la federación portuguesa. Unidos somos mucho más fuertes y la entrada de Marruecos nos ha dado fortaleza, su llegada ha colocado la candidatura en otra dimensión. No hay un proyecto capaz de cohesionar un país como este.
