Las aseguradoras Adeslas, Asisa y DKV han anunciado que no participarán en la licitación para prestar servicios sanitarios a Muface, la mutualidad de funcionarios públicos. Estas compañías, que eran las únicas proveedoras de servicios de salud en el último acuerdo con Muface, han decidido retirarse de la convocatoria debido a motivos financieros.
En contraste, Adeslas ha confirmado que sí optará a los conciertos de Mugeju (mutualidad de funcionarios de Justicia) e Isfas (mutualidad de las Fuerzas Armadas), que en conjunto atienden a 650.000 beneficiarios. Según Adeslas, su decisión reafirma su "compromiso con el mutualismo administrativo" en aquellas mutualidades donde la sostenibilidad económica es viable y que generan beneficios tanto para los funcionarios como para el sistema sanitario español.
Por su parte, DKV ha optado por no presentarse a las licitaciones de Muface ni Mugeju. La aseguradora asegura que, de haber continuado, habría afrontado pérdidas estimadas en 77 millones de euros en dos años, cifra similar a las pérdidas sufridas en el último concierto, que tuvo una duración de tres años. DKV considera que el modelo actual está infrafinanciado, dado que los gastos en prestaciones han superado en más de un 10% la prima recibida durante el último acuerdo.
Asisa, por su parte, ha decidido competir únicamente por los contratos de Isfas y Mugeju, excluyendo a Muface de su oferta.
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La subida en la prima no es suficiente para las aseguradoras
El 8 de octubre, el Gobierno publicó la licitación de los nuevos conciertos para las tres mutualidades, proponiendo un incremento del 17,12% en las primas. Sin embargo, la oferta inicial fue un aumento del 14%, que las aseguradoras consideraron insuficiente, amenazando con abandonar las negociaciones si no se alcanzaba un alza del 40% para evitar agravar sus pérdidas.
