El futuro primer ministro de Canadá, Mark Carney, ha declarado este miércoles su disposición a reunirse con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, para discutir los lazos comerciales en medio de la escalada de tensiones causada por la guerra de aranceles. «Estoy dispuesto a reunirme con el presidente Trump en el momento apropiado desde una posición de respeto por la soberanía canadiense y de trabajo hacia un enfoque común, un enfoque mucho más integral para el comercio», afirmó Carney durante su intervención en una empresa siderúrgica en Hamilton, Ontario.
Carney también subrayó que Ottawa «respeta su preocupación» respecto al tráfico de fentanilo, un tema que considera un «problema» compartido por ambas naciones. «El Gobierno ha actuado muy rápido y ha dado una respuesta que ha tenido un impacto enorme», mencionó el futuro primer ministro. Además, enfatizó que las condiciones de los trabajadores tanto canadienses como estadounidenses «mejorarán cuando se relance la mayor alianza económica y de seguridad del mundo».
Sobre los recientes aranceles impuestos por Estados Unidos, Carney describió la jornada como «un día difícil para Canadá» y para su industria, debido a lo que considera aranceles injustificados. En respuesta, Canadá ha anunciado la imposición de aranceles recíprocos a partir de mañana, abarcando importaciones estadounidenses por un valor adicional de 29.800 millones de dólares canadienses (18.946 millones de euros) bajo un enfoque «dólar por dólar». Estos nuevos aranceles se suman a las tarifas compensatorias del 25% aplicadas a 30.000 millones de dólares canadienses (19.073 millones de euros) en importaciones estadounidenses, las cuales fueron implementadas como respuesta a los aranceles de Washington anunciados el pasado 4 de marzo.
