Los gestores europeos de fondos se están preparando para un posible enfriamiento de la economía global, una perspectiva que surge de la reciente encuesta mensual realizada por Bank of America (BofA) para evaluar el estado de ánimo de la industria. Un 82% de los encuestados, la cifra más alta desde que se tienen registros a principios de siglo, considera que la economía global sufrirá un debilitamiento en el próximo año, influenciada por las imposiciones arancelarias de la Administración estadounidense de Donald Trump.
El pesimismo se acentúa en torno al crecimiento de Estados Unidos, donde un 89% de los gestores prevé una desaceleración inminente. En contraste, solo un 4% considera que China experimentará un crecimiento más débil, gracias a las expectativas de estímulos económicos y fiscales.
Los temores de recesión se han disparado, con un 49% pronosticando un aterrizaje brusco como el escenario más probable
Ante este contexto, los niveles de efectivo de los inversores han aumentado, alcanzando 4,8% a nivel mundial y 4,5% en Europa. Al mismo tiempo, se han registrado proyecciones de rendimiento de bonos a la baja, con solo un 5% de los encuestados esperando caídas en los rendimientos a 10 años, siendo esta la primera lectura negativa en 2025.
La expectativa de crecimiento en Europa ha disminuido, con un 37% de los gestores previniendo un crecimiento más débil en el Viejo Continente, en comparación con el 60%% que anticipaba un crecimiento más robusto el mes anterior. A pesar de ello, la mitad de los gestores confía en que el estímulo fiscal alemán marcará un punto de inflexión, permitiendo a la macroeconomía europea evitar los obstáculos impuestos por Estados Unidos. Sin embargo, un 44%% de los profesionales advierte que Europa no podrá permanecer indemne a esta situación.
En relación con las políticas arancelarias, un 57%% de los encuestados espera un aumento de la inflación mundial, aunque solo un 5%% considera que Europa se verá afectada por este escenario inflacionista. Este panorama ha llevado a una disminución del optimismo entre los inversores, destacando que solo un 19%% de los gestores espera ganancias a corto plazo para la renta variable europea, frente al 30%% del mes anterior.
Con respecto a los destinos de inversión, los gestores han señalado que Alemania sigue siendo su preferencia, seguida de España, mientras que los mercados de Italia, Francia, Suiza y Reino Unido han sido infraponderados. En el ámbito sectorial, se observa que un 7%% de los gestores anticipa una caída de los valores cíclicos europeos en comparación con los defensivos, lo que contrasta notablemente con el 50%% que esperaba un rendimiento superior de los cíclicos el mes pasado. Además, los bancos han experimentado el mayor recorte en su posicionamiento sectorial, siendo superados por los seguros, así como por los sectores de servicios públicos y atención médica.
A pesar de las caídas en los sectores cíclicos, el mercado cíclico de renta variable alemán sigue siendo el preferido entre los países europeos, gracias a los mencionados planes de estímulo que continúan generando expectativas positivas.
