La Casa Blanca ha confirmado que está en proceso de preparar un posible acuerdo con Pekín respecto a los aranceles, una medida que sigue a las decisiones tomadas por la Administración Trump, que impuso un gravamen del 125% a las importaciones procedentes de China, incrementándose aún más en un 20% adicional debido al flujo de fentanilo hacia Estados Unidos. En una rueda de prensa, la portavoz Karoline Leavitt expresó que «la Administración está preparando el terreno para un acuerdo con China», aunque no ofreció detalles sobre una posible fecha para la firma del pacto.
Además, Leavitt indicó que el equipo comercial del presidente ha recibido hasta 18 propuestas de países que buscan alcanzar un acuerdo sobre aranceles, y que más de 100 países han manifestado su interés en cerrar un pacto con Washington. El presidente, por su parte, anunció el pasado 9 de abril una pausa de 90 días en la imposición de aranceles recíprocos, excepto para China. Sin embargo, la Casa Blanca advirtió que el gigante asiático podría enfrentarse a un 245% de gravámenes si se suman todos los anuncios previos, incluyendo impuestos sobre productos específicos.
La sección 301 de la Ley de Comercio de Estados Unidos de 1974 autoriza al presidente a tomar todas las medidas pertinentes
, incluidas represalias arancelarias y no arancelarias, para lograr la eliminación de cualquier acto, política o práctica de un Gobierno extranjero que viole un acuerdo comercial internacional o que sea injustificada o discriminatoria.
