El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, destacó en un evento celebrado en Washington la importancia de la colaboración entre Estados Unidos y China para reequilibrar sus economías. Bessent afirmó que ambos países se encuentran ante una oportunidad increíble en el contexto de un cambio en el sistema global de comercio que busca mayores niveles de equidad. Durante su intervención en el Instituto de Finanzas Internacionales (IIF), afirmó que, mientras Estados Unidos se enfoca en aumentar su manufactura y reducir su consumo, China busca disminuir su dependencia del crecimiento basado en exportaciones y enfatizar el consumo interno.
A pesar de esta intención, el secretario del Tesoro advirtió que, según datos recientes, la economía china se está alejando del consumo y se está acercando nuevamente a una estructura centrada en la manufactura. Bessent expresó que este modelo, impulsado por un crecimiento vacío de exportaciones, “seguirá creando desequilibrios aún más graves” si no hay un cambio significativo. También enfatizó que es un modelo insostenible que perjudica no solo a China, sino al sistema económico global en su conjunto.
El país sabe que necesita cambiar. Todos saben que necesita cambiar y queremos ayudarla a cambiar porque nosotros también necesitamos un reequilibrio
Además, la mano tendida de Washington hacia Pekín coincide con informaciones del diario ‘The Wall Street Journal’, que indican que la Casa Blanca está considerando rebajar entre un 50% y un 65% los aranceles impuestos a las importaciones chinas, que actualmente se sitúan en un 145%. Sin embargo, la decisión final recaerá en el presidente Donald Trump, quien ha mostrado un tono más conciliador hacia China en sus recientes declaraciones, sugiriendo la disposición de “trabajar juntos” para mejorar las relaciones comerciales.
Por otro lado, Bessent subrayó que el comercio no es el único factor que contribuye a los desequilibrios económicos globales. Criticó la dependencia excesiva de la demanda estadounidense y las políticas de ciertos países que fomentan el ahorro excesivo, lo que a su vez restringe el crecimiento del sector privado. En este contexto, citó un informe elaborado por Mario Draghi sobre Europa, destacando que los países europeos deben tener en cuenta sus recomendaciones para corregir el estancamiento en sus economías.
El ‘statu quo’ de desequilibrios amplios y persistentes no es sostenible. No es sostenible para Estados Unidos ni, en última instancia, para otras economías
Bessent concluyó que, si Estados Unidos continúa ofreciendo garantías de seguridad y mercados abiertos, sus aliados deben intensificar sus compromisos con la defensa compartida, enfatizando que las políticas de la Administración Trump están empezando a mostrar resultados, y que “América primero no significa América en solitario”.
