La Unión Europea y Estados Unidos han formalizado un acuerdo para aplicar un arancel del 15% a las exportaciones. Este pacto incluye sectores clave como el farmacéutico y los semiconductores. La confirmación ha llegado a través de fuentes diplomáticas consultadas por Europa Press, que aseguran que esta nueva normativa también es parte de un esfuerzo conjunto para estabilizar las relaciones comerciales.
El acuerdo representa uno de los pasos más significativos dados por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Ambos líderes han respaldado esta hoja de ruta comercial en un comunicado conjunto, aunque hay que destacar que no tiene validez legal y es visto principalmente como una guía para la futura política comercial entre Washington y Bruselas.
Según las fuentes, ciertos productos europeos considerados como «sensibles», tales como el vino y las bebidas destiladas, han evitado el nuevo gravamen, pues no han sido incluidos en el comunicado conjunto. La decisión refuerza la idea de que se busca estabilidad en las relaciones y se intenta evitar una guerra comercial.
El pacto genera estabilidad en las relaciones y evita el peor de los escenarios como era entrar en una guerra comercial
Desde el pasado 7 de agosto, los aranceles del 15% ya se aplican al 70% de las importaciones europeas. Sin embargo, hay alivio en ciertos sectores como el automotriz, donde los recargos previamente establecidos en un 27,5% han sido notablemente reducidos.
El gravamen acordado es considerado «aceptable» por Bruselas y se presenta como la cifra máxima que se implementará en todos los sectores afectados. Este acuerdo supone una evolución importante en las relaciones económicas transatlánticas, marcando un claro esfuerzo por minimizar tensiones y facilitar el comercio internacional.
