La revisión más reciente del empleo en Estados Unidos ha revelado una discrepancia significativa en las cifras de empleo reportadas anteriormente. Según un comunicado emitido por la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS), se crearon 911.000 empleos menos de los previamente anunciados en el periodo comprendido hasta marzo de 2025. Esta importante corrección sugiere una posible desaceleración del mercado laboral que no había sido detectada.
Errores en el cálculo de empleos
El cambio en las cifras representa una eliminación del 0,6% del total de empleos no agrícolas a nivel nacional, un ajuste considerablemente mayor al típico 0,2% observado en revisiones de la última década. La BLS atribuye este error a diferencias en el cálculo de dos métricas independientes utilizadas para el conteo de empleos.
En agosto, el presidente Donald Trump tomó la controvertida decisión de reemplazar a Erika McEntarfer, entonces líder de la BLS. Alegó sin pruebas que los informes de la institución estaban siendo manipulados políticamente. Su reemplazo fue designado de entre las filas de The Heritage Foundation, un think tank de tendencia conservadora.
Impulso de los mercados hacia una política monetaria más laxa
La diferencia entre los empleos contabilizados y los efectivamente creados puede tener implicaciones significativas. En particular, podría reforzar las expectativas de los mercados financieros de una rebaja en los tipos de interés el próximo 17 de septiembre.
Este decalaje entre empleos contabilizados y creados no hace sino apuntalar aún más la apuesta de los mercados por una rebaja de tipos de interés
Todavía queda por ver cómo reaccionarán las autoridades económicas y el propio mercado ante este desajuste en las cifras de empleo, pero las señales apuntan hacia una posible flexibilización de la política monetaria.
