Westinghouse Electric, Cameco Corporation y Brookfield Asset Management han forjado una alianza estratégica junto con el Gobierno de Estados Unidos para acelerar el despliegue de energía nuclear en el país. La construcción de nuevos reactores, basada en la tecnología de Westinghouse, está valuada en al menos 80.000 millones de dólares (68.740 millones de euros) y busca impulsar tanto el crecimiento de la industria nuclear estadounidense como su cadena de suministro.
Impacto económico y estratégico de la nueva alianza
Una vez concluidos, los reactores ofrecerán energía fiable y segura, lo que incluirá una significativa capacidad para centros de datos y computación, así como un impulso al crecimiento de la inteligencia artificial en Estados Unidos. Las soluciones propuestas incorporan mecanismos de participación en los beneficios, lo cual permitirá a todas las partes, incluido el pueblo estadounidense, unirse al valor financiero y estratégico a largo plazo que Westinghouse creará gracias al avance de la energía nuclear y las capacidades de inteligencia artificial.
Con una estimación de que cada proyecto Westinghouse AP1000 de dos unidades generará o mantendrá 45.000 empleos en manufactura e ingeniería en 43 estados, se prevé que la implementación nacional pueda crear más de 100.000 empleos en el sector de la construcción, consolidando así la presencia de la energía nuclear en el país.
Esta alianza histórica respalda nuestros objetivos de seguridad nacional y mejora nuestra infraestructura crítica
Así lo expresó Howard Lutnick, secretario del Departamento de Comercio de Estados Unidos, señalando además que la colaboración permitirá reconstruir la soberanía energética y crear empleos bien remunerados. Chris Wright, secretario del Departamento de Energía, añadió que la cooperación con la principal empresa nuclear de Estados Unidos ayudará a materializar la visión del ex presidente Trump de revitalizar el país y ganar la carrera global en inteligencia artificial.
Connor Teskey, presidente de Brookfield Asset Management, considera que esta colaboración con el Gobierno de Estados Unidos ayudará a liberar el potencial que Westinghouse y la energía nuclear puedan tener para acelerar el crecimiento de la inteligencia artificial en Estados Unidos, satisfaciendo simultáneamente la creciente demanda de electricidad y necesidades de seguridad energética a gran escala.
