El Banco Central Europeo (BCE) ha decidido este jueves mantener sin cambios los tipos de interés oficiales, cumpliendo con las previsiones de los mercados. De este modo, la tasa de depósito (DFR) se mantiene en el 2%, la tasa de refinanciación principal (MRO) en el 2,15% y la facilidad marginal de préstamo (MLF) en el 2,40%.
La institución presidida por Christine Lagarde opta por mantener la pausa iniciada en junio, cuando detuvo el ciclo de recortes que redujo el precio del dinero en 200 puntos básicos tras ocho ajustes consecutivos a la baja.
El BCE apuesta por la prudencia ante un contexto económico incierto
“El Consejo de Gobierno ha decidido hoy mantener sin variación los tres tipos de interés oficiales del BCE. La inflación continúa cerca del objetivo del 2% a medio plazo y las perspectivas apenas han cambiado”, explicó el organismo emisor en su comunicado.
El BCE subraya que la resiliencia económica de la eurozona sigue apoyada en la fortaleza del mercado laboral, la solidez del sector privado y el impacto positivo de las anteriores bajadas de tipos. No obstante, advierte que las tensiones geopolíticas y los conflictos comerciales internacionales continúan generando incertidumbre.
Política monetaria dependiente de los datos
El Consejo de Gobierno reitera su “determinación” de estabilizar la inflación en torno al 2% a medio plazo. Para ello, las futuras decisiones sobre los tipos se tomarán reunión a reunión, en función de los nuevos datos económicos y financieros, las expectativas de inflación y la intensidad de la transmisión de la política monetaria.
El BCE ha descartado comprometerse con una senda concreta de tipos, manteniendo un enfoque flexible y dependiente de los datos.
Reducción progresiva de los programas de compra de activos
En relación con los programas de compra de activos (APP) y el Programa de Compras de Emergencia frente a la Pandemia (PEPP), el Banco Central Europeo confirmó que el tamaño de las carteras continúa disminuyendo a un ritmo “mesurado y predecible”, tras dejar de reinvertir los principales vencimientos.
La inflación en la eurozona repunta ligeramente en septiembre
La inflación de la eurozona se situó en septiembre en el 2,2% interanual, dos décimas más que el mes anterior. En el conjunto de la Unión Europea, el incremento fue del 2,6%, también dos décimas superior.
El aumento de precios en la zona del euro refleja un menor abaratamiento de la energía, que cayó un 0,4% frente al descenso del 2% registrado en agosto. Los alimentos frescos se encarecieron un 4,7%, ocho décimas menos.
Excluyendo la energía, la inflación se mantuvo estable por quinto mes consecutivo en el 2,5%, mientras que la inflación subyacente —que excluye alimentos, alcohol y tabaco— repuntó una décima hasta el 2,4%.
Entre los países de la UE, Rumanía (8,6%), Estonia (5,3%), Croacia y Eslovaquia (4,6%) registraron los mayores aumentos. Por el contrario, Chipre (0%), Francia (1,1%) e Irlanda y Grecia (1,8%) mostraron las tasas más bajas. En el caso de España, la inflación se aceleró tres décimas hasta el 3%.
