La eurozona se expandirá una vez más el 1 de enero de 2026 con la incorporación de Bulgaria como el vigésimo primer miembro. Esta es la primera ampliación desde la entrada de Croacia en 2023 y se produce en un contexto convulso marcado por una crisis política en el país eslavo. Las protestas contra los presupuestos de 2026, elaborados en euros, causaron la dimisión del gobierno búlgaro en diciembre.
Bulgaria formalizó su ingreso a la zona euro el 8 de julio de 2025 con el respaldo del Consejo de la Unión Europea, estableciendo un tipo de conversión de 1,95583 levas por euro. Aunque las aspiraciones búlgaras para ingresar al bloque monetario fueron claras desde su entrada a la UE el 1 de enero de 2007, los preparativos cobraron impulso en 2015 y recibieron el espaldarazo definitivo en 2020.
Desde agosto pasado, los precios en Bulgaria se indican tanto en levas como en euros, un procedimiento que se mantendrá hasta agosto de 2026. A partir de febrero de 2026, el euro será la única moneda legal, aunque los billetes y monedas de levas podrán ser canjeados indefinidamente y sin coste en el Banco Nacional de Bulgaria. Las entidades comerciales ofrecerán el servicio de cambio sin cargo hasta junio de 2026, pero podrán introducir tasas a partir de entonces.
El cambio de moneda llega en un contexto complicado: menos de un mes antes de la dimisión del primer ministro búlgaro debido a masivas protestas. Según la agencia Myara, el apoyo al euro ronda el 39%, mientras que el 57% de los ciudadanos se opone, temiendo que la adopción del euro incremente el coste de vida.
El gobernador del Banco Nacional de Bulgaria, Dimitar Radev, afirmó que la zona euro exige un mayor grado de disciplina, lo que podría ofrecer estabilidad en medio de fluctuaciones políticas internas
Christine Lagarde, presidenta del BCE, ha intentado mitigar los temores, afirmando que si bien es legítimo preocuparse por un aumento en los precios, en anteriores ampliaciones a la eurozona, el impacto en la inflación fue menor y temporal.
Para marcar la adhesión de Bulgaria, el Banco Central Europeo iluminará su edificio principal entre el 31 de diciembre de 2025 y el 11 de enero de 2026. En este contexto, el euro se convertirá paulatinamente en parte de la vida diaria de los búlgaros, con expectativas de que el apoyo público a la moneda crezca significativamente tras la transición, como ha ocurrido en otros países que se unieron recientemente a la eurozona.
