El 88% de los repartidores cree que la Ley de Riders, que está terminando de tramitarse en el Congreso de los Diputados, les impedirá obtener suficientes ingresos para subsistir. El colectivo muestra su "enorme preocupación" por su futuro y el grave impacto que la laboralización forzosa tendrá en el colectivo y su entorno, según los datos de la encuesta realizada por Deliveroo a sus repartidores en España. En algunos casos, la sensación va a acompañada de un gran nerviosismo (55%) y tristeza (36,6%) por su futuro.
En concreto, el 92% de los 'riders' encuestados considera que en la actualidad operan como profesionales autónomos, siendo totalmente libres en sus decisiones de prestación de servicios, y un 91% desearía continuar con este modelo. Además, el 90% lamenta que el texto actual no ha tenido en cuenta la opinión de los repartidores.
Los repartidores también han reconocido mayoritariamente una gran inquietud ante la nueva coyuntura en el colectivo y su entorno. Así ante la pregunta de cuál será su situación tras la aprobación de la Ley, un 44% de la muestra cree que trabajará, pero da por supuesto que con la implementación de la nueva norma no lograrán los ingresos necesarios para cubrir sus necesidades, un 32% cree que se convertirán en desempleados, otro 7% se ve trabajando en otro sector y un 4% cree que seguirá trabajando como 'rider', pero menos horas.
De esta forma, los 'riders' muestran un gran nerviosismo (55%) y tristeza (36,6%) por su futuro. Únicamente menos de 2% de los cerca de 1.000 participantes en el estudio afirma sentirse contento ante la posible regulación.
Además, el 57% de los repartidores señala como su principal preocupación el impacto de la nueva regulación en la viabilidad económica familiar (57%), seguido por el hecho de no poder trabajar con flexibilidad (37%).
Entre los beneficios que más valoran los repartidores que colaboran con la compañía, y que podrían dejar de disfrutar si se produce una laboralización forzosa, señalan el hecho de poder trabajar lo que quieran y cuando quieran, aspecto mencionado por el 76% de los repartidores, seguido de la flexibilidad para organizar horarios (74%) y la posibilidad de conciliar el trabajo como repartidor con otras profesiones o actividades (45.5%).
Con la nueva norma, tal y como está redactada a día de hoy, la categorización forzosa de los 'riders' como empleados les impedirá disfrutar de estos beneficios de flexibilidad laboral de los que no podrán disfrutar bajo el modelo impuesto por la nueva regulación.