El presidente ejecutivo de Naturgy afirma que "hay que leer el entorno y analizarlo bien para tomar decisiones"
El tejido empresarial ha vivido un proceso de transformación acelerado en el último año. Esto influye también en el liderazgo de las mismas, que ha provocado que los comités de dirección se hayan preguntado qué modelo seguir y llevar a cabo. Aunque, según Francisco Reynés, presidente ejecutivo de Naturgy, la clave es fija: “Hay que identificar las oportunidades y evitar las amenazas que esa evolución puede generar sobre nuestro negocio”.
Así lo ha destacado el presidente ejecutivo de Naturgy en el marco del XX Congreso de Directivos CEDE que se ha celebrado este jueves 4 de noviembre en Córdoba. Un encuentro en el que ha destacado que “los nuevos tiempos nos han dotado también de nuevas oportunidades que requieren saber, leer el entorno y analizarlo bien para tomar decisiones”.
Para Reynés, “lo que ha pasado en estos meses es que se nos han acelerado ciertas tendencias del entorno, se nos han abierto ciertos riesgos que probablemente no teníamos identificados y han aparecido otros modelos de negocio y otras oportunidades que probablemente también hubiesen aparecido, pero a una velocidad más lenta”.
Esto, ha resaltado el mandatario de Naturgy, “es importantísimo en el esquema de dirección porque un directivo no puede dejar de ver alrededor para adaptar su modelo a lo que pasa” y “la pandemia ha sido una cura de humildad que nos ha hecho ver que existen factores exógenos que nos pueden afectar a todos y que nos pueden hacer pensar en nuestros negocios”.
La apuesta de Naturgy
¿Y qué ha hecho Naturgy como caso ante este escenario utópico que ha llegado para quedarse? “Hemos puesto a las personas por delante, a nuestros clientes, y les hemos atendido de la forma que necesitaban para no ponerles en riesgo, de la misma forma que hemos atendido nuestros compromisos de solidaridad social”.
Y es que, en la era de la personalización, el tejido empresarial ha fijado al consumidor, al cliente, como el epicentro de su ecuación. Una nueva forma de entender cada modelo de negocio que requiere de una recomposición de pensamiento por parte de los directivos. Para Reynés, la clave es tener tres características vitales: “técnicamente competentes, humanamente valores y deseos que podríamos llamar intenciones”. Y ha añadido: “El verdadero liderazgo es el que ejercen personas que sustentan sus negocios con intenciones, porque son las que generan y sustentan el liderazgo”.
“Creo que el propósito no es ni más ni menos que la plasmación de las intenciones”, ha insistido éste, que ha considerado que éstas “no pueden estar al margen de las competencias ni de los propios valores de la empresa, que se emanan de las que tienen sus directivos”. Por eso, ha concluido, “es tan importante tener valores alineados en el equipo y que los accionistas estén de acuerdo con los valores y que todo se ejerza en coordinación”.