Balance y solvencia
A cierre de marzo, BBVA contaba con un total de activos valorados en 801.690 millones de euros, un 8,4% más. De esa cifra, los préstamos y anticipos a la clientela se elevaron un 7,4%, hasta 388.949 millones de euros. Del total de la cartera crediticia, los préstamos a empresas avanzaron un 6,6% en el año, hasta 188.902 millones de euros. De la cartera dedicada a particulares, las hipotecas avanzaron un 3,1%, hasta 94.887 millones de euros, mientras que el negocio de crédito al consumo avanzó un 10%, hasta 44.175 millones de euros. La cartera de tarjetas de crédito se elevó un 20%, hasta los 22.816 millones de euros.
De su lado, los pasivos experimentaron un incremento del 8,4%, hasta alcanzar los 745.912 millones de euros. Los depósitos de bancos centrales y entidades de crédito se redujeron un 28,3%, mientras que los depósitos de clientes avanzaron un 10,3%, hasta 436.763 millones de euros. Fuera de balance, el banco gestionaba 178.313 millones de euros de recursos de clientes, un 10,8% más que un año antes. De esa cifra, los fondos de inversión y carteras gestionadas se situaron en 143.345 millones de euros, un 20,8% más. De su lado, los fondos de pensiones se contrajeron un 24,7%, hasta 29.286 millones de euros.
El volumen total de crédito dudoso a 31 de marzo era de 14.938 millones de euros, lo que supone un alza de 13% frente a un año antes. En todo caso, con el alza de la cartera crediticia, la tasa de mora solamente se eleva en una décima, hasta el 3,4%. Respecto a la solvencia, BBVA cerró el primer trimestre con una ratio CET1 en su variante 'fully loaded' del 12,82%, lo que supone un descenso de 31 puntos básicos frente al arranque de 2023. La ratio de capital total, en cambio, mejoró en 36 puntos, hasta el 16,66%. El retorno de capital tangible (RoTE) fue del 17,7% entre enero y marzo de 2024, lo que supone una mejora de 1,4 puntos porcentuales frente al 16,3% del primer trimestre de 2023.
