Keir Starmer, líder del Partido Laborista, promete un cambio en la dirección del país tras haber ganado las elecciones con una arrolladora victoria que le han otorgado uno de los mejores resultados en la historia de su partido. El partido ha asegurado una amplia mayoría con más de 410 escaños de los 650 de la Cámara de los Comunes. El Partido Conservador del actual primer ministro, Rishi Sunak, ha conseguido alrededor de 120 escaños, el peor resultado en su historia al perder más de 200 asientos en comparación con las elecciones de 2019.
"La gente ha hablado esta noche aquí y en todo el país y está lista para el cambio. Habéis votado. Ahora nos tocar a nosotros dar resultados". Además, ha adelantado las claves de su gestión. "Es hora de acabar con la política de la interpretación y volver a la política del servicio público", confesaba Starmer tras conocer lso resultados.
Starmer (Southwark, Londres, 2 de septiembre de 1962), creció en una familia de clase trabajadora. Estudió Derecho en la Universidad de Leeds y en la Universidad de Oxford; convirtiéndose en uno de los abogados más destacados del país, especializado en derechos humanos. En 2008 fue nombrado Director del Ministerio Público, un cargo en el que supervisó importantes casos criminales y reformas legales. Su desempeño en este rol le valió un reconocimiento considerable y estableció su reputación como un defensor de la justicia y el estado de derecho.
Su entrada en la política se produjo en 2015, cuando fue elegido como miembro del Parlamento por el distrito de Holborn y St Pancras. Su enfoque serio y su capacidad para abordar cuestiones complejas rápidamente lo destacaron dentro del Partido Laborista. Fue nombrado Secretario de Estado del Brexit en el gabinete en la sombra, donde desempeñó un papel crucial en la articulación de la postura del partido sobre la salida del Reino Unido de la Unión Europea.
En 2020, tras la renuncia de Jeremy Corbyn, Starmer fue elegido líder del Partido Laborista. Su liderazgo se ha caracterizado por un intento de modernizar y unificar el partido, alejándose de las divisiones internas y adoptando una postura más centrista y pragmática. Su objetivo ha sido reconstruir la confianza del electorado en el partido, presentándolo como una alternativa viable y competente al Partido Conservador.
El papel de Keir Starmer como Primer Ministro
Como Primer Ministro, Starmer llega al poder con varios frentes abiertos que pretenden ser todo un reto: La economía británica, todavía recuperándose de los efectos del Brexit y la pandemia de COVID-19, necesita una dirección firme y efectiva. El líder político se centrará en la recuperación económica, la creación de empleos y la inversión en servicios públicos esenciales, como el Servicio Nacional de Salud (NHS).
Otro tema central en su agenda es la crisis climática; comprometiéndose a implementar políticas ambiciosas para reducir las emisiones de carbono del Reino Unido. En cuanto a la política exterior, Starmer busca restablecer la posición del país en el escenario global mejorando las relaciones con la Unión Europea y fortaleciendo las alianzas con otros países clave.
