El sindicato CGT ha llevado a cabo una intensificación de la huelga indefinida en la empresa Holaluz, que comenzó el pasado 14 de enero. Esta acción se enmarca dentro de una serie de protestas por la supresión del teletrabajo, que se implementará de forma efectiva a partir del 28 de enero, así como por la eliminación de «otros beneficios sociales», según un comunicado del sindicato.
Convocatoria de manifestación y nueva huelga
La CGT ha anunciado una manifestación programada para el 28 de enero a las 12.00 horas en la Plaza Sant Jaume de Barcelona. De acuerdo con el sindicato, el regreso al trabajo presencial será obligatorio cinco días a la semana a partir de esa fecha. En este contexto, se ha convocado una huelga total e indefinida que comenzará ese mismo día, tras una huelga ya existente desde el 14 de enero.
Impacto en los derechos de los trabajadores
El retorno a la oficina viene acompañado de la eliminación de otros beneficios sociales que ya habían pasado a ser derechos adquiridos
CGT ha manifestado su preocupación por la eliminación de beneficios como seguro médico, cursos de idiomas y campamentos extraescolares, que no solo contribuían a la conciliación laboral y personal, sino que también ofrecían un alivio económico en un contexto de sueldos congelados. Según el sindicato, el 27 de diciembre, la empresa comunicó a la plantilla la inminente supresión del teletrabajo y la opción de optar por la extinción del contrato hasta el 31 de enero de 2025. Hasta la fecha, cerca del 25% de los empleados ha solicitado esta opción, y se espera que este porcentaje continúe aumentando.
El teletrabajo ha demostrado ser una herramienta muy útil, pero ahora hay una tendencia creciente de eliminarlo
CGT califica esta situación como un «ERE encubierto» y ha anunciado su intención de considerar la presentación de una demanda colectiva. Además, el sindicato ha presentado una denuncia ante la Inspección de Trabajo por lo que consideran una vulneración del derecho a la huelga. La denuncia incluye el establecimiento de un registro paralelo al fichaje, donde los trabajadores deben registrar sus datos y nivel de participación en la huelga, lo cual, según CGT, sirve para supervisar y limitar el ejercicio del derecho a la huelga.
