El Departamento de Estado de Estados Unidos anunció el pasado miércoles que los buques gubernamentales de Estados Unidos podrán transitar por el canal de Panamá sin la obligación de pagar tasas. Esta decisión se produce tras la reciente visita del secretario de Estado estadounidense a Panamá y otros países de la región, donde se abordó la polémica generada por las tasas en este importante paso marítimo durante la administración de Donald Trump.
Un breve comunicado en la red social X señaló que «el Gobierno de Panamá ha acordado no cobrar más tasas a los buques del Gobierno de Estados Unidos que transiten por el canal de Panamá. Esto le ahorra al Gobierno estadounidense millones de dólares al año». Sin embargo, hasta el momento, el Gobierno panameño y la Autoridad del Canal de Panamá, organismo dependiente del Ministerio de Asuntos del Canal, no han confirmado esta información.
Reunión y preocupaciones sobre la influencia china
El secretario de Estado, Rubio, realizó una visita a Panamá el 2 de febrero, donde expresó al presidente panameño, José Raúl Mulino, el fuerte rechazo de Estados Unidos a la creciente influencia de China en el canal. Durante la visita, el presidente Mulino anunció que no se renovaría el memorando de entendimiento firmado con China en noviembre de 2017 relacionado con la Iniciativa de la Franja y la Ruta.
En paralelo, el secretario de Defensa, Pete Hegseth, mantuvo una conversación «introductoria» con el ministro de Seguridad Pública de Panamá, Frank Alexis Ábrego, donde enfatizó que su prioridad es «salvaguardar los intereses de seguridad nacional de EE. UU.», incluyendo el acceso sin restricciones al canal de Panamá.
Ambos reafirmaron el compromiso de los dos países con la defensa del canal y acordaron ampliar la cooperación entre las Fuerzas Armadas de EE. UU. y las fuerzas de seguridad de Panamá
Hegseth también expresó su agradecimiento por los esfuerzos de Panamá en la lucha contra el crimen organizado transnacional y la migración irregular, así como por la disposición a aceptar migrantes de terceros países desde territorio estadounidense para su repatriación.
