El Congreso español someterá este jueves, 11 de diciembre, la Ley de Servicios de Atención a la Clientela a su último examen con la votación de las enmiendas introducidas por el Senado. Sin embargo, la votación no incluirá la polémica reforma propuesta por el Partido Popular (PP) para reducir el IVA en alimentos básicos, lo que fue aprobado anteriormente en la Cámara Alta.
El Gobierno ha logrado finalmente vetar la reducción del IVA entre enero y junio de 2026, que incluía carnes, pescados, conservas, leches y huevos. La medida, impulsada por el PP, fue objetada debido a que supondría una pérdida fiscal de 3.780 millones de euros. Aunque el Ejecutivo ya había intentado bloquear esta enmienda en el Senado, el PP, que domina la Mesa de la Cámara Alta, permitió su continuación.
La Constitución otorga al Gobierno el poder de impedir medidas legislativas que autoricen “una disminución de los ingresos presupuestarios”
No obstante, al llegar al Congreso, controlado por el PSOE y Sumar, se aceptó el veto gubernamental tras una reunión clave de la Mesa posterior a la sesión plenaria.
Entre otras modificaciones sometidas a votación, se incluye la rebaja de las obligaciones de las empresas para atender en diferentes lenguas cooficiales. Según la nueva disposición, la atención en lenguas cooficiales solo será exigible dentro del territorio de la comunidad autónoma correspondiente. Asimismo, se han realizado ajustes en la terminología, como cambiar «clientela» por «cliente» y «personas consumidoras vulnerables» por «consumidores en situación de vulnerabilidad».
Además, se extiende el plazo máximo para responder a las quejas de clientes de 15 a 30 días hábiles y se trasladan los requisitos para las empresas privadas a la Administración General del Estado y sus entidades vinculadas. Todas estas medidas, vitales para la implementación de la ley, requieren la ratificación del Congreso para proceder a su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
