Este lunes, Israel ha lanzado un ataque aéreo en Doha, capital de Qatar, dirigido contra la cúpula de Hamas, organización considerada terrorista por Estados Unidos, la Unión Europea e Israel. El bombardeo se produjo mientras los dirigentes del grupo islamista participaban en negociaciones de alto el fuego sobre la guerra en Gaza.
Las explosiones sacudieron la zona de Katara, uno de los distritos más concurridos de Doha, dejando escenas de humo y caos, según testigos locales. Se trata de la primera vez que Israel extiende su ofensiva militar al territorio qatarí, un actor clave en la diplomacia regional.
Israel justifica el ataque contra Hamas en Doha
De acuerdo con las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF), el ataque tenía como objetivo a altos dirigentes de Hamas que, según sus servicios de inteligencia, planeaban coordinar operaciones militares desde territorio qatarí.
La operación ocurre en un momento crítico, ya que las negociaciones en curso buscaban un alto el fuego en Gaza tras meses de intensificación del conflicto.
Reacción de Qatar: “Un asalto criminal cobarde”
El gobierno de Qatar reaccionó de inmediato y calificó los bombardeos como un “asalto criminal cobarde” y una violación flagrante del derecho internacional y la soberanía nacional. Doha, mediador habitual en las negociaciones entre Hamas e Israel, denunció que este ataque compromete gravemente los esfuerzos diplomáticos en la región.
Condena internacional y respuesta de la ONU
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, condenó duramente la ofensiva israelí en Qatar, destacando que se trata de una acción que “viola el derecho internacional y la soberanía de un Estado miembro de la ONU”.
Asimismo, hizo un llamado urgente a restaurar la vía diplomática y retomar los esfuerzos por un alto el fuego duradero en Gaza.
Varios países del Golfo Pérsico y potencias internacionales han expresado preocupación por una posible escalada del conflicto tras este ataque sin precedentes.
