El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha destacado la importancia de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) como un actor fundamental en la gobernanza sanitaria global. Durante su intervención en la reunión ministerial celebrada en París en el marco de la 92ª sesión general de la OMSA, Planas afirmó que «el papel de la OMSA debe seguir siendo vital para afrontar estos desafíos, garantizar la sanidad animal y, con ella, la salud global».
El ministro participó en una mesa redonda de alto nivel donde discutió temas relevantes como la vacunación animal, el comercio internacional y su impacto en el sector ganadero y la economía mundial. En este sentido, reafirmó el compromiso de España con el multilateralismo y la cooperación internacional como herramientas clave para hacer frente a los grandes desafíos mundiales. Planas enfatizó que «España, como país fundador, aboga por una OMSA cada vez más fuerte, inclusiva y estratégicamente preparada».
El ministro también hizo hincapié en la importancia de avanzar hacia un comercio internacional agroalimentario basado en normas sanitarias transparentes, éticas y científicamente fundamentadas, que eviten barreras innecesarias, pero que al mismo tiempo garanticen la salud pública, la protección ambiental y el bienestar animal. Planas subrayó que «el aspecto económico del comercio es importante, pero el ético también lo es».
Planas llamó a los países miembros a aplicar dichas normas con claridad, transparencia y compromiso ético
Además, el ministro mantuvo una reunión con sus homólogos de Francia, Annie Genevard, y Portugal, José Manuel Fernandes, donde trataron temas como las negociaciones del próximo marco financiero plurianual, la gestión de nuevas técnicas genómicas, el bienestar animal en el transporte, y la propuesta de simplificación de la Política Agraria Común (PAC) presentada por la Comisión Europea. En este contexto, los tres países abogaron por una PAC que sea fuerte, bien financiada y claramente diferenciada.
Finalmente, Planas subrayó que la seguridad alimentaria debe considerarse también como una política de seguridad. Advirtió que «una Europa más segura no solo se construye con inversiones en defensa, sino también con la garantía de un suministro alimentario estable y sostenible para toda la ciudadanía».
Salud mental en el trabajo: cuidar de quienes sostienen las empresas
