El Instituto de Crédito Oficial (ICO) ha emitido su séptimo bono verde, con un importe de 500 millones de euros, que se ha lanzado al mercado este martes. Este nuevo bono ha atraído un notable interés, especialmente entre cuentas internacionales, que han adquirido el 70% de la operación. Este alto porcentaje refleja la confianza de los inversores en el papel del ICO dentro del mercado.
Otro aspecto relevante de esta emisión es que el 75% se ha colocado entre inversores considerados como ESG (ambientales, sociales y de gobernanza). La emisión inició con un spread de 10 puntos básicos sobre la referencia del Tesoro español, y el volumen de órdenes de compra registrado ha superado los 2.600 millones de euros. Esta situación ha permitido ajustar el diferencial en 5 puntos básicos, resultando en el spread más estrecho de la historia del ICO en una emisión pública.
El ICO ha consolidado su posición como emisor de referencia en el mercado de bonos verdes
La transacción ha sido dirigida por importantes entidades financieras como BBVA, BNP Paribas, Crédit Agricole (CIB), Deutsche Bank y Santander. Este bono paga un cupón del 2,8%. Hasta la fecha, el ICO ha lanzado un total de 7 operaciones de este tipo, movilizando un total de 3.500 millones de euros en financiamiento.
Con estos recursos, el ICO ha financiado 53 proyectos relacionados con energías renovables y transporte limpio de empresas españolas, contribuyendo a movilizar una inversión aproximada de 22.300 millones de euros y evitando la emisión de más de 1.250.822 toneladas de CO2 anuales.


