"Los mejores proyectos europeos reciben una subvención de 2,5 millones, los españoles reciben unos 600.000 euros”
“La pandemia ha demostrado que la ciencia está preparada y que puede actuar rápido para resolver cualquier reto global siempre que haya la adecuada financiación”
Esta científica, especializada en biología molecular, se ha convertido en el bastión de la investigación contra el cáncer en España. La trayectoria de María Blasco, directora del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) comenzó de forma casual a raíz de una charla escolar y la ha llevado a ser alumna de premiados científicos. Hoy es ella la galardonada, pero, por mucho que pase el tiempo, su lucha por conseguir el remedio contra enfermedades incurables no cesa.
¿En qué momento una niña descubre que quiere ser científica? ¿Qué es lo que le atrae de la profesión?
Lo descubrí cuando estudiaba el bachillerato. Me decidí por la carrera de biología con la intención de llegar a ser bióloga molecular, tras una charla de Paco Rodriguez Varela, un profesor de la Universidad de Alicante que nos habló de sus trabajos sobre ingeniería genética. La biología molecular se dedica a entender cómo funciona la vida y creo que ahí está el secreto del porqué se producen las enfermedades y de cómo curarlas.
En su carrera ha estado amadrinada por Margarita Salas y Carol Greider. Ahora es usted la profesional con la que nuevos científicos quieren trabajar. ¿Qué enseñanzas de ambas transmite o transmitiría a las nuevas generaciones?
Margarita y Carol fueron mis directoras de Tesis Doctoral y de Postdoctoral, respectivamente. Fueron mis mentoras y mis maestras. Ambas me enseñaron a investigar, a luchar y a tener la seguridad necesaria para tener la ambición de dirigir mi propio laboratorio de investigación.
¿Es España un buen país para la investigación científica?
En España hay centros de investigación que están entre los mejores del mundo y que están distinguidos con la acreditación de excelencia “Centros Severo Ochoa-Unidades Maria de Maeztu”. España destaca en muchos cambios de la investigación, incluida la biomedicina, y sus científicos tienen mucho prestigio internacional. Sin embargo, el nivel de apoyo a la ciencia no es suficiente, el % del PIB que se dedica a la ciencia en nuestro país no llega a la media europea. Además, hay numerosas trabas administrativas que dificultan el día a día de los centros de investigación, incluidas las restricciones de contratación y de promoción interna.
El Ministerio de Ciencia e Innovación dispone este año un presupuesto de 3.843 millones de euros para promover la I+D+I. Es la mayor cifra de la historia, pero, ¿es suficiente? Aunque entendemos que cada proyecto es diferente, ¿cuánto dinero sería el óptimo para poder en un año lograr serios avances en el desarrollo de determinada investigación científica?
Un presupuesto alto ayuda, sin embargo, esto es algo que no debe ser puntual, sino sostenido en el tiempo. Por poner un ejemplo, los mejores proyectos europeos reciben unos 2,5 millones de euros del European Research Council; mientras que en España los mejores proyectos del Plan Estatal reciben unos 600.000 euros. Los salarios de los investigadores en España tampoco son competitivos con los de otros países punteros.
Una de sus líneas de investigación han sido los telómeros. Para quien no esté familiarizado con el tema, ¿cómo pueden ayudar los telómeros a prevenir un cáncer?
Las células del cáncer tienen la propiedad de multiplicarse de manera indefinida y por lo tanto de ser inmortales. Para adquirir esa inmortalidad tienen que activar mecanismos de mantenimiento de los telomeros. En mi grupo estamos desarrollando fármacos potenciales contra el cáncer basados en destruir o bloquear los telómeros del cáncer. Con estos fármacos pretendemos quitar la inmortalidad al cáncer.
¿En qué fase se encuentra en estos momentos el desarrollo de potenciales fármacos y/o soluciones contra el cáncer?
Hay numerosas líneas de investigación y de desarrollo de nuevos fármacos contra el cáncer basados en el conocimiento profundo del origen de los distintos tipos de tumores. La biología computacional del cáncer que analiza las alteraciones de miles de tumores, nos ayuda a identificar nuevas dianas terapéuticas contra el cáncer.
Cuanto más envejezca la población, más posibilidades hay de incrementar los casos de cáncer. ¿Eso también supone que, pese a los constantes avances que hay, exista una mayor presión en el ámbito científico para buscar fórmulas de prevención?
Efectivamente, el cáncer es una enfermedad asociada a la acumulación de daño en nuestras células, algo que aumenta confirme vivimos y cumplimos años. La incidencia de casos de cáncer está aumentando porque cada vez hay mas personas mayores. En España en el año 2050, una de cada tres personas tendrá más de 65 años, una edad a la cual el riesgo de cáncer es alto. Esto pone el foco en la prevención, en entender cómo se origina el cáncer para desarrollar métodos y tratamientos que permitan prevenirlo y detectarlo a tiempo, cuando aún es fácilmente curable por un procedimiento quirúrgico.
¿Es consciente la población de que un estilo de vida saludable puede favorecer a que las próximas generaciones ayuden a combatir este tipo de enfermedades?
Un estilo de vida saludable disminuye la cantidad de daño que acumulan nuestras células con los años, y por lo tanto disminuirá el riesgo de cáncer y otras enfermedades del envejecimiento.
¿Ha ensombrecido/perjudicado la inmediatez y la urgencia de la cura contra la Covid-19 el desarrollo de otro tipo de enfermedades?
La pandemia Covid-19 nos ha demostrado que la ciencia está preparada y puede actuar rápido para resolver cualquier reto global siempre que haya la adecuada financiación. Las tecnologías basadas en biología molecular que han servido para hacer vacunas y tratamientos contra la Covid1-9 de una manera efectiva, pueden usarse para desarrollar terapias contra otras enfermedades.
Precisamente la Covid-19 dejó patente la competencia que hay en el sector científico por desarrollar las vacunas. Esto sucede en todas las líneas de investigación. ¿Perjudica o favorece llegar al término final que todos buscan?
Creo que Covid-19 ha sido un ejemplo claro de que la ciencia es internacional, los científicos están preparados y la ciencia puede resolver retos globales.
En el Programa de Investigación Clínica tienen acuerdos con diferentes hospitales mediante los que se realizan los ensayos clínicos a determinados pacientes. En estos años con la Covid-19 como protagonista, ¿se ha podido continuar con dichos tratamientos con normalidad o se han visto influenciados por la pandemia de alguna u otra forma?
Desde el CNIO no tratamos pacientes y desconocemos en qué medida se han visto retrasados los diagnósticos y tratamientos de nuevos casos de cáncer y/o de otras patologías.
Un 68% de los científicos que trabajan en el CNIO son mujeres, sin embargo, no se alcanza el 50% en los puestos de dirección de investigación. ¿Sigue la ciencia inmersa en un mundo de estereotipos cuando de altos cargos se refiere?
Aún hay estereotipos que desfavorecen a las mujeres en sus carreras profesionales. En un estudio reciente de la revista Science se vio que niñas de 6-7 años ya se consideraban menos capaces de resolver problemas que se les decía que eran “difíciles”, cuando esto mismo no ocurría cuando tenían 5 años. Los estereotipos son culturales y operan en contra de las mujeres, haciéndoles perder la confianza, entre otras cosas.
Por último, volviendo al ámbito personal/profesional, ¿qué le falta por lograr a María Blasco en su carrera?
Me gustaría que algunas de las cosas que hemos descubierto puedan tener un impacto en la curación de enfermedades aún incurables como son algunos tipos de cáncer y las enfermedades degenerativas del envejecimiento.