La banca privada, dirigida a individuos de alto poder adquisitivo, se forjó con la idea de gestionar grandes patrimonios; centrándose en la preservación del capital y en cómo maximizar el rendimiento de las inversiones mediante estrategias diversificadas. El cliente tipo de banca privada es un individuo con un patrimonio neto elevado, que busca no solo preservar y aumentar su riqueza, sino también asegurar un legado para las generaciones futuras. En dichas operaciones, la confidencialidad es clave en la relación entre el banco privado y sus clientes.
El informe El Mercado de la Banca Privada en España de Deloitte destaca la importancia de la calidad del servicio, la profesionalidad del banquero y la estabilidad de la institución como factores clave que los clientes consideran al elegir una entidad de banca privada. Además, menciona que la industria está experimentando un crecimiento continuo y una consolidación, a pesar de los retos económicos y geopolíticos.
Sin embargo, la creciente regulación financiera impone mayores exigencias en términos de cumplimiento y transparencia; y la competencia de nuevos actores, como las fintech y los asesores automatizados, parece estar modificando, por ahora ligeramente, el panorama de la gestión patrimonial.
En cualquier caso, José María Ferrer, director de Renta 4 Banca Privada, considera que sigue habiendo para el crecimiento de este sector un gran margen dada la poca penetración que tiene la banca privada en la gestión de patrimonios de grandes clientes comparado con otros países: "En España sigue predominando el sector inmobiliario como foco inversor de los ahorros en muchos patrimonios, y aunque la cultura financiera está en auge en gran parte de la sociedad, todavía queda mucho recorrido para concienciar en el ahorro y gestión profesionalizada en lo que al dinero se refiere. En la medida en que la banca privada siga extendiendo sus capacidades a mucho patrimonialista que necesita diversificar su patrimonio, el recorrido en lo que a potenciales clientes se refiere seguirá siendo alta. Por otro lado, en el sector de grandes patrimonios, vamos a seguir viendo muchos eventos de liquidez por venta compañías, así como de otros activos ilíquidos, y que van a orientar parte del dinero resultante en inversiones financieras líquidas a la espera de oportunidades cada vez más difíciles de encontrar".
Ferrer destaca que la vehiculización de activos financieros, tanto líquidos como ilíquidos, "va a suponer una gran oportunidad en entidades como la nuestra, que va a dar solución a estructuras fiscalmente eficientes. El estar presente en este segmento con las capacidades suficientes va a suponer una referencia en el crecimiento de activos bajo gestión", añade.
Desde CaixaBank Banca Privada explican que, en este ámbito, los clientes tienen capacidad de ahorro y requieren planificación para sus inversiones. En concreto, se les da acceso a todos los servicios clásicos que ofrecen los bancos y a los gestores de banca privada, especialistas en planificación financiera (previsión, inversión, financiación y operaciones bancarias). Ayudan a cada cliente a identificar y alcanzar las metas que se proponga en base sus circunstancias personales, su situación vital, su patrimonio, sus preferencias, su perfil de riesgo y sus necesidades económicas.
La inversión mínima para acceder a un servicio de Banca Privada depende de cada entidad. La clasificación de cada entidad puede tanto estar ligado únicamente a un nivel determinado de patrimonio, como incorporar otros factores, como potencialidad, necesidades y planes de sucesión en las familias. Las bancas privadas pueden ofrecer a los clientes distintos modelos de servicio, desde el asesoramiento tradicional por objetivos al independiente, así como el servicio de bróker los que quieren operar a iniciativa propia o la gestión discrecional.
Cuántos ricos hay en España actualmente
La cifra sigue sin estar clara. Según el informe de Capgemini, en 2023 había aproximadamente 250.600 individuos con un alto patrimonio neto, lo que representa un incremento del 5.6% respecto al año anterior. Este grupo de personas ricas tiene un patrimonio colectivo que ascendió de 687.200 millones de dólares en 2022 a 726.400 millones de dólares en 2023.
En concreto, y según el Global Wealth Report 2023 de Credit Suisse, España cuenta con aproximadamente 1,2 millones de personas con un patrimonio neto superior a un millón de dólares; grupo que representa una fracción significativa de la riqueza total del país. Entre ellos, un pequeño segmento pertenece a la categoría de ultra ricos, aquellos con patrimonios que superan los 30 millones de dólares. Ambos grupos forman la base de clientes potenciales para la banca privada en España.
Según nos informan desde CaixaBank Banca Privada -una de las principales entidades del sector en España, con 145.600 millones de euros de patrimonio y 132.750 clientes con más de 500.000 euros-, el patrimonio que atesora la banca privada supera los 786.500 millones de euros a datos de cierre de 2023. En los últimos cinco años ha experimentado un crecimiento del 30%. Datos récord que registra este segmento de negocio que analizamos en el Ranking de Banca Privada.
Sin embargo, en esta entrada nos detenemos en el volumen que se canaliza a través del vehículo estrella, el fondo de inversión. Aunque ha aumentado la inversión de los grandes patrimonios en estos productos hasta los 245.000 millones de euros, el peso que representa sobre el total no ha variado sustancialmente durante este lustro. Si en 2019 el porcentaje que se canalizaba en vía fondos era de casi el 31%, a datos de 2023 éste se queda en el 32%. El año 2021 fue el que más cuota ganó este vehículo del total de patrimonio gestionado por la banca privada, llegando a casi un 35% del total.
Requisitos para ser cliente de banca privada
Carlos Magán, socio de Afi - compañía española líder en consultoría y formación independiente- y director comercial de Afi Inversiones Globales, SGIIC, explica que el aumento de la riqueza y el ahorro generalizado en Europa está produciendo "un aumento de la demanda de servicios de banca privada por parte de los clientes, necesitados de un asesoramiento profesionalizado que le ofrezca productos óptimos desde el punto de vista financiero, pero también fiscal, en un momento en el que las rentas del ahorro y el propio patrimonio están cada vez más penalizados desde un punto de vista tributario".
Para ser considerado cliente de banca privada en España, se suele requerir un patrimonio mínimo que puede variar según la entidad financiera. Generalmente, esta cifra oscila entre los 500.000 euros y un millón de euros. Entre sus servicios, la banca privada ofrece servicios exclusivos y personalizados que incluyen asesoramiento financiero, gestión de inversiones, planificación fiscal, y sucesión patrimonial, entre otros. En general, la mayoría de los individuos con un alto patrimonio neto buscan no solo maximizar sus inversiones sino también recibir asesoramiento integral para la gestión de su patrimonio.
Cómo funciona la banca privada
La banca privada implica un enfoque personalizado y confidencial, en el que cada cliente recibe atención individualizada a través de un asesor financiero dedicado exclusivamente a él. Este asesor actúa como el punto de contacto principal, proporcionando una visión holística de las necesidades financieras del cliente y coordinando una amplia gama de servicios.
Carlos Magan sostiene que, desde un punto de vista de producto, "las entidades de banca privada han intentado diferenciarse a través de productos no tradicionales, como son los que invierten en activos no cotizados (mercados privados) que, en muchos casos ofrecen de forma exclusiva a sus clientes y que aportan unas características financieras diferenciales frente a los productos tradicionales". "En cuanto al servicio, como indicamos, los aspectos fiscales cobran cada vez mayor relevancia, pero también otro tipo de servicios enfocados a ofrecer soluciones financieras en aspectos inmobiliarios o empresariales, ámbitos en los que los grandes patrimonios tienen cada vez mayores necesidades", añade el socio de Afi.
Además, y según el informe de McKinsey & Company, el uso de inteligencia artificial y análisis de datos permite a los bancos privados ofrecer un asesoramiento más proactivo y personalizado. La digitalización también facilita una gestión más eficiente y accesible de los servicios, adaptándose a las expectativas de una clientela cada vez más sofisticada y tecnológicamente avanzada.
Una de las principales funciones de la banca privada es la gestión de inversiones. Los bancos privados diseñan carteras de inversión personalizadas, diversificadas entre diferentes clases de activos como acciones, bonos, bienes raíces, fondos de cobertura y capital privado. Esta gestión activa busca no solo preservar el capital, sino también maximizar el rendimiento ajustado al riesgo del cliente.
Por otro lado, la banca privada ofrece planificación financiera y fiscal; un servicio que incluye la elaboración de estrategias a largo plazo para alcanzar los objetivos financieros del cliente, como la jubilación, la educación de los hijos o la compra de propiedades. Además, la optimización fiscal es crucial para maximizar el patrimonio neto del cliente, mediante la estructuración eficiente de las inversiones y la implementación de estrategias fiscales adecuadas.
La planificación patrimonial y sucesoria es otro tema central en la banca privada. Este servicio se enfoca en la preservación y transmisión del patrimonio a las futuras generaciones. Los bancos privados asesoran en la creación de estructuras legales como fideicomisos y fundaciones, que no solo protegen los activos del cliente sino que también facilitan una transición ordenada y eficiente del patrimonio familiar.
Además de los servicios financieros tradicionales, la banca privada ofrece servicios de valor añadido que pueden incluir desde la gestión de propiedades y la organización de viajes de lujo hasta el acceso a eventos exclusivos y oportunidades de networking. Estos servicios están diseñados para mejorar la calidad de vida de los clientes y fortalecer la relación con el banco.
En CaixaBank Banca Privada cuentan con un servicio denominado gestión discrecional de carteras. El servicio de gestión discrecional de carteras es aquel en el que el cliente delega en profesionales del Grupo CaixaBank la gestión de su cartera. Ofrecemos distintas soluciones de gestión discrecional, tanto en fondos, como en valores y en combinaciones de ambas.
La gestión delegada de fondos está agrupada en dos gamas diferenciadas: la Gama Smart, compuesta por las carteras Smart Money, Smart Allocation y Smart Rentas; y la Gama Master, compuesta por las Carteras Master y las Carteras Core Master. En gestión delegada de valores, hemos lanzado la Gama SUV con la cartera SUV. Además, para aquellos clientes con una inversión mínima de 2,4 millones de euros ofrecemos un servicio de gestión discrecional de carteras personalizado, con carteras a medida, las carteras Asset Plus. De esta manera, se ofrecen soluciones de inversión adaptadas a cada perfil del cliente.
Con datos de la industria a marzo 2024, CaixaBank continua como líder en Gestión Discrecional de Carteras en España con casi 47.000 millones de euros bajo gestión, lo que supone cerca del 40% de cuota.
Principales tendencias y desafíos de la banca privada
En cuanto a las principales tendencias actuales en el sector y su evolución, Joaquín Poblet, director de Link Capital, indica que su visión es que la subida de tipos de interés ha permitido mayor incorporación de productos de Renta Fija en las carteras de los inversores. "Esta incorporación siempre debe ser progresiva, ya que no se debe invertir en estos productos hasta que la subida de tipos de interés haya finalizado, pero eso es lo difícil: ¿cuándo ha finalizado esa subida y se empiezan a descontar bajadas? A finales de 2023 el mercado empezó a descontar bajadas de tipos inminentes mientras que a principios de 2024 esas expectativas se retrasaron. Al final, la realidad ha sido una sorpresa ya que en el primer semestre de 2024 sí ha bajado tipos el Banco Central Europeo y no se han bajado tipos en Estados Unidos, siendo la primera vez en los últimos tiempos en que Europa se ha adelanto en actuaciones sobre política económica a Estados Unidos. En cualquier caso, sí parece que seguimos en un buen momento para que esa tendencia hacia activos de Renta Fija se prolongue en el futuro cercano", asegura el experto.
Y recuerda que estamos en niveles muy bajos de volatilidad: "Menos el mes de abril que repuntó ligeramente, el primer semestre de 2024 se ha caracterizado por unos niveles de volatilidad históricamente bajos a pesar de las incertidumbres que se mencionan, no tanto económicas como políticas (elecciones en Estados Unidos) y sobre todo geopolíticas. La unión de estas situaciones, unidos a la subida de tipos que mencionaba en la pregunta anterior hace una combinación perfecta de factores para que la banca privada busque productos estructurados de bajo riesgo con capital asegurado o cuasi asegurado y que a la vez permita al inversor participar de las ganancias en los índices en caso de que no se materialicen los riesgos e incertidumbres que tenemos en el horizonte".
Hay varias áreas dentro de la banca privada en la que los desafíos son significativos. Según José María Ferrer, director de Rena 4 Banca Privada, en lo que respecta al negocio, "mantener los ritmos de crecimientos que hemos tenido en los últimos años, tanto orgánica como inorgánicamente, se presenta como un reto en el que tenemos que seguir muy atentos para incorporar talento con capacidad de captación y retención de clientes, así como la adquisición de entidades que gestionen patrimonios y cuya inclusión pueda suponer una rápida integración y sinergias con nuestra actividad".
Por otro lado, Ferrer destaca la adaptación tecnológica a las necesidades de los clientes así como para el cumplimiento normativa, en constante evolución: "La inversión en tecnología es uno de nuestros principales focos por todo lo que conlleva y supone. Estar siempre en vanguardia es una premisa y no hay que descuidarse un ápice en aras a una presencia permanente entre los líderes de la banca privada en España". Y concluye: "Por último, diría que conocer tu posicionamiento y virtudes para desde un punto de vista de inversión, destacar en producto, análisis y recomendaciones". Hay que aportar valor añadido a una oferta general similar en muchas entidades, y el cliente se tiene que sentir dentro de Renta 4 como en un buque insignia del sector.
