CaixaBank ha anunciado el inicio de su séptimo programa de recompra de acciones, que arrancará este martes con un importe máximo de 500 millones de euros y una duración de hasta seis meses desde su lanzamiento. Esta decisión forma parte de la estrategia financiera de la entidad para optimizar la estructura de capital y mejorar el valor para sus accionistas.
El programa contará con la gestión de Goldman Sachs, que actuará como intermediario para coordinar las adquisiciones. Este banco de inversión tendrá la libertad para decidir el momento oportuno de realizar las compras en el mercado, según se detalla en la comunicación efectuada por CaixaBank a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La normativa establece que durante el programa no se podrá exceder el 25% del volumen diario medio de transacciones en el centro de negociación pertinente. Este volumen diario medio se calculará tomando como referencia los 20 días de negociación previos a cada operación de compra.
Con esta medida, CaixaBank refuerza su compromiso con los accionistas y busca una acción sostenida y controlada en el mercado.
La medida es vista como un esfuerzo por parte de CaixaBank para consolidar su posición financiera y asegurar un crecimiento sostenible, mientras que también proporciona flexibilidad para adaptarse a las condiciones del mercado. Este tipo de iniciativas son habitualmente valoradas positivamente por los inversores, ya que permiten elevar el precio de las acciones al reducir su número en circulación.
