El ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, encabezará una reunión clave este jueves para evaluar los recientes desarrollos en política comercial. El encuentro se centrará en el grupo de trabajo sobre aranceles de bienes de equipo y material eléctrico, en el contexto del acuerdo comercial entre Estados Unidos (EEUU) y la Unión Europea (UE), sellado la semana pasada.
Este pacto, que establece un arancel general máximo del 15% sobre las exportaciones, también afecta a sectores como el farmacéutico y los semiconductores. Sin embargo, la reducción de aranceles para los vehículos, actualmente en un 27,5%, está supeditada a un mayor acceso a productos agrícolas estadounidenses.
El acuerdo entre la UE y EEUU
El acuerdo, surgido de un consenso político previo en Escocia entre la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el ex presidente estadounidense, Donald Trump, ahora está plasmado en un comunicado conjunto. Aunque este documento no es legalmente vinculante, sirve como una hoja de ruta para las futuras relaciones comerciales entre Washington y Bruselas.
La reunión del ministro Cuerpo con el sector de los bienes de equipo se produce tras la reciente interacción con grupos de trabajo de bienes de consumo, productos industriales, alimentarios y del sector químico.
Estas reuniones son parte del Plan de Respuesta y Relanzamiento Comercial, una medida adoptada para contrarrestar el impacto de los nuevos aranceles impuestos por Estados Unidos a productos europeos. Este plan, aprobado el pasado 8 de abril, moviliza 14.320 millones de euros como medida de apoyo para las empresas y empleados afectados.
Medidas adicionales del plan
El Plan de Respuesta contempla una variedad de iniciativas para fortalecer la economía española ante las medidas arancelarias estadounidenses. Incluye una nueva línea de avales por 5.000 millones de euros a través del Instituto de Crédito Oficial, destinada a financiar a las empresas perjudicadas por estos cambios en la política arancelaria.
Asimismo, se ha fortalecido el Fondo para la Internacionalización de la Empresa (FIEM) con un presupuesto adicional de 200 millones de euros, alcanzando un total de 700 millones. Además, el plan incorpora una dotación de 20 millones adicionales para financiar operaciones no reembolsables, y aumentar las iniciativas estratégicas de comercio internacional.
El objetivo es proteger el tejido productivo e impulsar la competitividad e internacionalización de las empresas españolas.
Adicionalmente, se han implementado medidas como la ampliación del límite máximo de cobertura de CESCE de 9.000 a 15.000 millones de euros, lo que permitirá movilizar rápidamente 2.000 millones en coberturas para proyectos internacionales afectados.
Con estas acciones, el Gobierno español busca mantener una vía de información eficiente que permita acompañar a las empresas afectadas en este contexto comercial desafiante.
