Una delegación del sector privado chileno, compuesta por más de 80 empresarios, mantuvo este lunes un encuentro en la CEOE para abordar proyectos de interés y posibilidades de colaboración con cerca de 250 empresarios y representantes de instituciones de ambos países. Bajo el lema ‘Una ruta común de colaboración’, la jornada fue inaugurada por el vicepresidente primero de CEOE, Miguel Garrido; el presidente del capítulo chileno del Consejo Empresarial Chile-España, Andrés Montero; y la directora de proyectos en ICEX-Invest in Spain, Vanesa Álvarez Franco.
La delegación empresarial chilena estuvo liderada por las principales organizaciones del país, con sus presidentas, Susana Jiménez (Confederación de la Producción y del Comercio – CPC) y Rosario Navarro (Sociedad de Fomento Fabril – Sofofa). Este encuentro tuvo como objetivo poner de manifiesto las oportunidades en sectores claves como la construcción, agroindustria, banca, electricidad, gas, tecnología y minería.
Se destacó la solidez y el potencial de las relaciones económicas entre Chile y España, que comparten retos y oportunidades en una economía global caracterizada por la transformación energética, la digitalización y la necesidad de un crecimiento sostenible. Desde ambos lados del Atlántico, se coincidió en la relevancia de consolidar un entorno favorable a la inversión, garantizando seguridad jurídica, previsibilidad normativa e institucionalidad robusta.
Nuestra relación, además del ámbito empresarial, se refuerza en los distintos modelos de integración regional
Durante la apertura de la jornada, Miguel Garrido subrayó la importancia de ratificar el Acuerdo Marco Avanzado UE-Chile, que actualiza el marco comercial y promueve aspectos como la sostenibilidad, la igualdad de género y el acceso a recursos energéticos limpios. A su vez, Andrés Montero resaltó la convergencia de desafíos entre ambos países, mientras que Vanesa Álvarez confirmó la confianza que inspira Chile entre los inversores, destacando que España es un socio robusto y confiable, resaltando que hay 164 empresas chilenas establecidas en el país europeo.
Representando al empresariado chileno, Susana Jiménez destacó la relevancia histórica de la relación con España y el papel crucial de las inversiones en el desarrollo económico local. Las empresas españolas han generado cerca de 140.000 empleos en Chile, con valores compartidos como la democracia y la iniciativa privada en común. Para avanzar, enfatizó la necesidad de contar con reglas claras y predictibilidad para el desarrollo de proyectos sostenibles.
La jornada continuó con paneles enfocados en sectores de interés, donde Rosario Navarro enfatizó la necesidad de recuperar el dinamismo económico, al señalar que Chile necesita volver a crecer a tasas del 4%. Por su parte, desde CEOE, Gregorio Izquierdo destacó que España se encuentra en una posición privilegiada como puerta de entrada a Europa con un entorno favorable para la inversión.
Chile ha sido históricamente un centro financiero regional
En términos financieros, José Manuel Mena, presidente de la Asociación Española de Banca en Chile, valoró la fortaleza del sistema bancario chileno y su conexión con la banca española. Citó que la mitad de la banca chilena tiene matriz extranjera, lo que proporciona una dimensión global. Asimismo, Javier Rodríguez Pellitero, secretario general de la AEB, insistió en la importancia de evitar regulaciones excesivas que puedan obstaculizar el desarrollo del sector.
En el ámbito infraestructural, Julián Núñez, vicepresidente de CEOE y presidente de Seopan, subrayó que Chile representa un punto estratégico para las empresas españolas, destacando que más de 83 de ellas están activas en el país. Para complementar, Claudio Cerda, presidente de la Cámara Chilena de la Construcción, mencionó que la mejora en la permisología facilita la ejecución de proyectos que requieren alianzas público-privadas sólidas.
