Estados Unidos podría estar considerando una importante modificación en la forma de calcular su Producto Interior Bruto (PIB). En un giro que genera tanto preocupación como curiosidad, se ha planteado la posibilidad de excluir el gasto público del PIB y publicarlo de manera separada. Esta medida se inscribe dentro de un contexto donde las iniciativas de recortes impulsadas por el Departamento de Eficiencia Gubernamental (Doge), liderado por Elon Musk, podrían impactar el crecimiento económico del país.
El secretario de Comercio de Estados Unidos, Howard Lutnick, ha declarado: «Históricamente, los gobiernos han manipulado el PIB. Cuentan el gasto público como parte del PIB. Así que voy a separarlos y hacerlos transparentes», según informaciones proporcionadas por Associated Press. Esta afirmación pone de relieve la preocupación por la potencial distorsión que puede resultar de alterar una métrica fundamental que mide el tamaño y la evolución de la economía. Dada la importancia de la contribución del gasto gubernamental al PIB, una separación podría ofrecer una imagen menos precisa de la salud económica del país.
La medida puede interpretarse como un intento de ocultar los efectos de los programas de ajuste del Doge a nivel nacional, que se podrían traducir en el despido de decenas de miles de funcionarios. Esto, a su vez, podría conllevar una caída en el consumo familiar, afectando directamente la economía en su conjunto.
Elon Musk defendió anteriormente en su cuenta de ‘X’, antigua ‘Twitter’, que la inversión pública no genera valor
En sus declaraciones en la plataforma social, Musk argumentó que «una medida más precisa del PIB debería excluir el gasto público. De lo contrario, se puede inflar artificialmente el PIB gastando dinero en cosas que no mejoran la vida de las personas». Este enfoque ha suscitado un amplio debate sobre la naturaleza y la efectividad del gasto público en el bienestar económico.
