El Congreso de los Diputados se prepara para convalidar este jueves un decreto ley destinado a paliar las consecuencias de los aranceles impuestos por la administración de Donald Trump. La convalidación esperada deberá sortear la abstención de Podemos y el rechazo rotundo de PP y Vox. Este paquete de medidas, en vigor desde el pasado 9 de abril, debe ser sometido a votación en el Congreso para confirmar su validez.
En el debate de este jueves, los partidos como PSOE, Sumar, Esquerra, Junts, Bildu, PNV, BNG y Coalición Canaria se alinean en pro de la convalidación, sumando un total de 174 votos a favor que superarían los 171 en contra de PP, Vox y UPN. Este resultado podría ascender a 175 apoyos si el exministro José Luis Ábalos, actualmente en el Grupo Mixto, decide respaldar el decreto.
El Ejecutivo, bajo la dirección de Pedro Sánchez, ha iniciado una ronda de contactos con varios grupos parlamentarios, excluyendo a Vox, para presentar las medidas de apoyo a los sectores afectados por los aranceles. Sin embargo, un intento de consenso inicial por parte del ministro de Economía, Carlos Cuerpo, se vio frustrado tras un acuerdo con Junts que prioriza las ayudas a empresas según su volumen de exportaciones. Este acuerdo, que concede aproximadamente un 25% de las subvenciones a Cataluña, ha generado tensión con el PP, alejándolos de un posible pacto.
La oposición ha criticado duramente las medidas incluidas en el decreto, argumentando que la respuesta del Gobierno de Sánchez se basa en deuda, préstamos y avales, en lugar de un plan estructurado para hacer frente a la situación. En este sentido, el decreto prevé movilizar 7.720 millones de euros para ayudar a las empresas afectadas mediante líneas de avales ICO y otros recursos para potenciar la internacionalización.
El único plan que conocen es el plan del Partido Popular. Nosotros lo pusimos encima de la mesa, después nos llamaron y el Gobierno decidió que nuestras propuestas no le parecían adecuadas
Por otro lado, Ione Belarra, secretaria general de Podemos, ha manifestado su intención de abstenerse en la votación a menos que se incluya la expropiación de viviendas en manos de fondos de inversión norteamericanos en el debate legislativo. Criticando lo que denomina un «Gobierno de la guerra», Belarra sostiene que la respuesta del Ejecutivo a la guerra comercial de Trump es inadecuada y que los fondos destinados a gasto militar deberían invertirse en áreas como la seguridad energética, la sanidad o la vivienda.
El decreto frente a los aranceles del Ejecutivo no sirve para nada y no será útil para proteger al tejido productivo ni a los trabajadores
