En abril, el Euríbor ha experimentado su mayor caída interanual en más de 15 años, situándose en el 2,143%. Este notable descenso se ha registrado a falta de confirmación del Banco de España, según datos recopilados por Europa Press. Este indicador, fundamental para la mayoría de las hipotecas variables en España, ha alcanzado mínimos desde agosto de 2022, cuando el Banco Central Europeo (BCE) alteró su política monetaria aumentando los tipos para combatir la inflación en la eurozona.
Comparado con marzo, el Euríbor ha disminuido en 0,25 puntos básicos. En relación con abril de 2024, el recorte es de 1,56 puntos básicos, marcando la mayor reducción interanual desde agosto de 2009. Para un propietario con una hipoteca variable de 150.000 euros a 30 años y un diferencial del 0,99% más Euríbor, esta revisión con el nivel de abril podría resultar en un ahorro de 133 euros al mes, es decir, un total de 1.600 euros al año. Este cálculo resalta el impacto significativo que tiene el cambio en el tipo de interés, especialmente en fases tempranas del préstamo.
El Euríbor ha vuelto a dar otra sorpresa
Los expertos de iAhorro señalan que, a pesar de la imprevisibilidad del Euríbor, este mes ha quebrantado la aparente estabilidad en los valores medios mensuales que se había observado. De hecho, el indicador llegó a caer por debajo del 2,1% en su evolución diaria, alcanzando su punto más bajo el 23 de abril con un 2,022%. Según el director de hipotecas de iAhorro, Simone Colombelli, esto podría indicar que el Euríbor pronto podría situarse por debajo del 2%.
Desde HelpMyCash se argumenta que las actuales caídas se dan en un contexto de tensiones internacionales relacionadas con aranceles impuestos, y luego suspendidos, por el expresidente de EEUU, Donald Trump. Este ambiente de incertidumbre ha beneficiado a los titulares de hipotecas variables, pues estos expertos prevén que el Euríbor cierre el primer semestre entre el 1,90% y el 2,20%.
Finalmente, Sergio Carbajal, responsable de hipotecas de Rastreator, indica que la tendencia del Euríbor continuará siendo bajista, aunque su evolución dependerá de las decisiones que tome el BCE sobre la reducción de los tipos oficiales de interés. Asimismo, recalca la importancia de monitorizar la política arancelaria de Estados Unidos y su impacto en la economía de la eurozona, ya que un debilitamiento económico en Europa podría impulsar al BCE a reducir aún más los tipos para estimular la actividad económica.
