El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha advertido sobre el aumento de la inestabilidad financiera global como resultado de las tensiones en la guerra comercial. En su ‘Global Financial Stability Report’, publicado este martes, el organismo ha señalado que, desde su primera alerta en octubre, factores como la sobrevaloración de activos, el apalancamiento y la incertidumbre económica podrían intensificar las crisis económicas y endurecer las condiciones financieras.
El informe subraya una súbita revalorización que comenzó en febrero, coincidiendo con el anuncio de aranceles por parte del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Esta revalorización se acentuó el 2 de abril, cuando se implementaron gravámenes ‘recíprocos’ que sorprendieron a los mercados por su magnitud. La respuesta de otros países ha exacerbado aún más la incertidumbre.
Este informe indica que los riesgos para la estabilidad financiera mundial han aumentado considerablemente, debido, principalmente, al endurecimiento de las condiciones financieras mundiales
Kristalina Georgieva, directora del FMI, ha señalado que, a pesar de la turbulencia en los mercados, aún existe margen para futuras correcciones en los valores bursátiles y en los bonos soberanos. Advierte que estos reajustes podrían profundizarse si la situación geopolítica empeora, especialmente afectando a los mercados emergentes, cuyos activos podrían verse perjudicados por salidas de capital o dificultades en la refinanciación de deuda.
El FMI también ha identificado ciertas vulnerabilidades en entidades con excesivo apalancamiento y ha destacado cómo la interconexión entre bancos y fondos de inversión ha incrementado la exposición del sistema financiero tradicional a riesgos no bancarios.
El organismo ha instado a abordar estas debilidades reforzando las infraestructuras de mercado, mejorando la supervisión y regulación del sector financiero y fortaleciendo las herramientas de resolución de crisis y provisión de liquidez en emergencias. En particular, se ha enfatizado la importancia de mitigar las vulnerabilidades financieras y de estar preparados para gestionar crisis, ya que esto es esencial para contener impactos negativos en la economía global.
La mitigación de las vulnerabilidades financieras y la preparación para la gestión de crisis son fundamentales para contener un posible impacto adverso de la evolución del sector financiero sobre el panorama macroeconómico
El informe también recomienda asegurar el acceso a liquidez en caso de «pánico financiero», especialmente en los mercados de bonos y crédito, y ha enfatizado la necesidad de implementar criterios de Basilea III de forma coherente y con vigilancia independiente. A los países con alta deuda, les aconsejan gestionar sus cuentas públicas de manera creíble y les instan a proteger su soberanía monetaria frente a los desafíos que representan los criptoactivos.
