El mercado inmobiliario residencial en España experimenta un significativo auge en 2025, con estimaciones que sugieren la posibilidad de alcanzar las 800.000 operaciones de compraventa al cierre del año. Esta cifra representa un incremento cercano al 25% en comparación con las 641.919 operaciones registradas el año anterior, según datos de Donpiso. El subdirector general, Emiliano Bermúdez, atribuye este impulso a la falta de oferta y la presión de la demanda. Se espera que el precio medio de la vivienda en España crezca un 8%, alcanzando casi los 2.000 euros por metro cuadrado, siendo más pronunciado en grandes capitales donde podría llegar a los 4.000 euros.
Por su parte, Tecnotramit prevé unas 750.000 compraventas para 2025, con un alza de precios entre el 4% y el 6%. La compañía señala la falta de obra nueva como el gran freno del mercado. Vicenç Hernández, CEO de Tecnotramit, advierte sobre la posible existencia de una burbuja, cuya eventual desestabilización podría tener graves efectos a nivel social, afectando principalmente a colectivos con menos recursos.
Comunidades como Madrid, Cataluña, la Comunidad Valenciana y Andalucía son las áreas con mayor dinamismo, concentrando más del 50% de las operaciones de compraventa. A pesar de este crecimiento, la escasez de vivienda asequible y la falta de políticas estructurales siguen dificultando un desarrollo sostenible del sector. Según Bermúdez, es crucial atender la demanda mediante oferta viable, precios asumibles y seguridad jurídica para abordar la crisis habitacional que evoca los niveles del 2007.
La brecha entre lo que se construye y lo que demanda el mercado seguirá presionando al alza tanto precios de compra como alquileres
Hernández considera que la solución a estos problemas radica en un plan nacional de oferta y rehabilitación. De este modo, se buscaría equilibrar el mercado y proteger a los hogares de rentas medias y bajas que, de otro modo, podrían enfrentar aprietos económicos.
