El reciente informe elaborado por el Consejo General de Economistas (CGE) y la Cámara de Comercio de España ha revelado que el peso de las exportaciones de bienes y servicios en la economía española representa el 40,9% del Producto Interno Bruto (PIB). Este dato, publicado el jueves, supera notablemente a los registrados por Italia (36,6%) y Francia (34,7%).
La investigación, titulada ‘Evolución económica, social, empresarial e institucional de España en el período 2014-2024’, fue presentada por el presidente del CGE, Valentín Pich, y el presidente de la Cámara de Comercio, José Luis Bonet. Ambos destacaron dentro del informe que las empresas han servido como un pilar de resiliencia frente a los desafíos y crisis vividos en la última década, incluyendo la pandemia de Covid-19.
En este contexto, Bonet subrayó que
las empresas de España han sido parte indispensable de la transformación y el progreso del país en los últimos 10 años
, resaltando la internacionalización como un factor crucial que contribuye significativamente al crecimiento económico.
Por su parte, Pich planteó la necesidad de un entorno fiscal y regulador que sea más favorable para que las empresas continúen su expansión, ya que aún persisten problemas que limitan su desarrollo. Se refirió a la necesidad de reformas estructurales en áreas como el empleo, la fiscalidad y la innovación, dado que España mantiene tasas de desempleo superiores a la media europea, impactando de forma notable a los jóvenes y a los mayores de 45 años.
Compromiso con la sostenibilidad y el papel del turismo
El informe también hace hincapié en la creciente inversión de las empresas en sostenibilidad, con un aumento del 72,5% en iniciativas ambientalmente sostenibles desde 2014. Raúl Mínguez, director del estudio y responsable del Servicio de Estudios de la Cámara de Comercio, afirmó que, a pesar de los logros en sostenibilidad, España enfrenta
desafíos estructurales, como la baja productividad y la insuficiente inversión en I+D+i
, que limitan su potencial de crecimiento.
El sector turístico, que ha pasado por altibajos en la última década, es también uno de los principales motores de la economía. Desde 2014 hasta 2019, las llegadas de turistas aumentaron de aproximadamente 64,9 millones a 83,5 millones, generando ingresos aproximados de 92 mil millones de euros. Se prevé que, para 2025, el PIB turístico continúe creciendo, consolidando aún más su importancia en la economía española, contribuyendo actualmente con alrededor del 12% al PIB y empleando cerca del 13% de la fuerza laboral del país.
