El Tesoro Público ha llevado a cabo la colocación de 5.820,622 millones de euros en deuda a medio y largo plazo, en línea con las expectativas previamente establecidas. Esta operación se ha realizado en un contexto marcado por el aumento de la rentabilidad ofrecida por las tres referencias subastadas, según los datos publicados por el Banco de España. La subasta tuvo lugar el mismo día en que el Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) celebraba una nueva reunión.
Desde el pasado mes de enero, cuando el BCE redujo los tipos en 25 puntos básicos, los analistas del mercado anticipan una posible nueva disminución, aunque el BCE ha manifestado la necesidad de ejercer “cautela”. Isabel Schnabel, representante alemana en la Ejecutiva del BCE, comentó recientemente que los tipos de interés actuales podrían no ser restrictivos, por lo que se requiere una vigilancia continua en las decisiones monetarias.
Detalles sobre la colocación de deuda
En esta ocasión, el Tesoro ha colocado obligaciones del Estado a diferentes plazos: obligaciones a 7 años con un cupón del 3,10%; obligaciones a 10 años con un cupón del 3,15%; y obligaciones indexadas a la inflación europea con una vida residual de 8 años y 9 meses y un cupón del 0,70%. La demanda total de estos títulos ha superado los 10.805 millones de euros, casi duplicando la cantidad adjudicada.
La elevada demanda refleja el interés sostenido de los inversores en los títulos españoles
En particular, se han colocado 2.532,445 millones de euros en obligaciones del Estado a 7 años, frente a una demanda de 4.412,445 millones de euros, con un interés marginal situado en 3,080%, un incremento con respecto al 2,709%% de la subasta anterior. Por su parte, en la subasta de obligaciones a 10 años, se han adjudicado 2.774,041 millones de euros, por debajo de la demanda de más de 5.224,041 millones, con una rentabilidad marginal que ha aumentado del 3,18%% al 3,522%% actual. En el caso de las obligaciones indexadas a la inflación, se han colocado 514,136 millones de euros, en respuesta a una demanda de 1.169,136 millones, con un interés marginal que ha subido del 1,112%% anterior al 1,280%% actual.
Programa de financiación y previsiones
En cuanto al futuro, el Tesoro Público estima unas necesidades de financiación nuevas de aproximadamente 60.000 millones de euros para 2025, lo que supone un aumento de 5.000 millones respecto a 2024. Este incremento se justifica por la necesidad de afrontar la reconstrucción y relanzamiento de las zonas afectadas por la catástrofe de la DANA. En cifras brutas, las emisiones totales alcanzarán 278.000 millones de euros, un 7,4%% más que el cierre de 2024.
El Tesoro continuará con la diversificación de la base inversora y apostará por la emisión de bonos verdes
Para mantener una vida media de la deuda en torno a 8 años, el Tesoro planea realizar un total de 48 subastas ordinarias de letras y bonos. Asimismo, se contempla la reemisión del bono verde emitido en 2021 con el objetivo de financiar proyectos de transición ecológica, proseguir con la diversificación de la base inversora y, en 2025, recurrir a sindicaciones para la emisión de algunas referencias de Obligaciones del Estado.
