Este martes, 14 de octubre, se han implementado nuevos aranceles mínimos del 10% en Estados Unidos sobre las importaciones globales de madera y mobiliario fabricado en este material. Anunciados a finales de septiembre por el presidente Donald Trump, estos gravámenes incluyen un 10% sobre todas las importaciones de madera aserrada y blanda, además de un significativo 25% sobre ciertos muebles de cocina y baño.
Impacto de los gravámenes en la industria del mueble
La orden de Trump también contempla incrementos futuros de estos aranceles, estableciendo un tipo del 30% para productos de madera tapizados y del 50% para armarios de cocina y muebles de baño, a partir del 1 de enero de 2026. Esta medida busca proteger la industria nacional frente a importaciones que podrían representar una amenaza.
Los gravámenes continuarán vigentes, excepto para los países con los que Estados Unidos alcance un acuerdo que aborde la amenaza de menoscabo a la seguridad nacional que representan las importaciones de productos de madera.
El presidente destacó que estos aranceles se suman a cualquier otro derecho, impuesto, tasa o cargo aplicable a las importaciones de productos de madera. Esta política refuerza la postura proteccionista del gobierno estadounidense y podría desencadenar reacciones en los mercados internacionales, afectando las relaciones comerciales y el flujo de materiales.
