Goldman Sachs, el prominente banco estadounidense, ha emitido un pronóstico que sugiere la posibilidad de que los precios del petróleo caigan por debajo de 40 dólares por barril hacia finales del próximo año. Este descenso potencial estaría ligado a los efectos de la guerra comercial impulsada por Donald Trump, lo que podría conducir al mundo a una recesión, junto con el posible retroceso de los recortes de producción de los países miembros de la OPEP+.
Según un informe de la entidad, al que ha tenido acceso el diario ‘The Guardian’, este escenario, aunque calificado como improbable, implicaría que el precio del barril Brent podría experimentar una fuerte caída, alcanzando el nivel más bajo desde noviembre de 2020, periodo que precedió al incremento de los futuros del crudo debido a los estudios sobre la eficacia de las vacunas contra el COVID-19.
El esquisto estadounidense ofrece un suelo cada vez más firme a precios más bajos
Goldman Sachs justifica esta perspectiva señalando que, en primer lugar, el desarrollo del esquisto en Estados Unidos está proporcionando un soporte firme ante precios bajos. En segundo lugar, consideran que una posible recesión en EE.UU. en 2025 no sería en extremo severa, gracias, en parte, a la falta de grandes desequilibrios financieros en el sector privado.
El análisis del banco contempla un escenario base donde el petróleo caiga a 62 dólares en diciembre y a 55 dólares para finales de 2026. Esto dependería de la consecución de una gran reducción de los aranceles que permitiría a EE.UU. evitar una contracción económica, a la vez que se prevé un aumento moderado en la producción de petróleo.
