El vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, ha expuesto la necesidad de establecer fondos similares a los ‘Next Generation EU’ para el rearme de la Unión Europea. En un evento organizado por Esade en Madrid, Guindos afirmó: «El esfuerzo es tan prioritario y tan intenso que, antes o después, habrá que crear un instrumento de financiación de gasto en defensa conjunto. Algo parecido a los Next Generation en el ámbito de Defensa».
Guindos también lamentó la inexistencia de un «verdadero mercado interior» en Europa, no solo en el ámbito bancario, sino también en bienes y servicios, debido a la disparidad regulatoria entre los Veintisiete, a diferencia de la jurisdicción única que posee Estados Unidos. Sin embargo, sugirió que las políticas de la segunda Administración Trump podrían moderar estas diferencias, favoreciendo la armonización.
El exministro español de Economía calificó la situación actual de Europa como un «momento de encrucijada». Destacó la necesidad de independencia del continente respecto a EE.UU. en temas de defensa, y mencionó desafíos domésticos como el auge de movimientos populistas y el envejecimiento demográfico. Con respecto al acuerdo comercial UE-EE.UU., Guindos indicó un «sabor agridulce», ya que aunque se evitó una guerra comercial, los aranceles medios aumentaron del 3% al 15%.
Impactos a nivel global y estructura interna
El vicepresidente señaló la posibilidad de que un futuro pacto comercial entre Washington y Pekín cause que las exportaciones chinas se desvíen hacia Europa, potencialmente llevando a una desglobalización y a mayores costos de suministro. También comentó que a corto plazo, los aranceles podrían ser inflacionistas aunque a medio plazo, se mitigaría este efecto.
Pese a todo, Guindos afirmó que el dólar seguirá siendo un refugio para los inversores en busca de estabilidad.
Además, resaltó la fortaleza del Estado de Derecho de la UE como un diferenciador importante en el cuestionamiento actual del multilateralismo global, lo que podría aumentar la influencia del club comunitario y del euro.
Sobre España, Guindos destacó dos cambios estructurales: el saneamiento del sistema bancario y la competitividad de la economía, reflejada en una balanza de pagos positiva. Aunque sorprendido por la actualidad del tema de inmigración en España, resaltó su impacto positivo en el crecimiento económico, a pesar de las tensiones en el precio de la vivienda. El alto nivel de afiliación a la Seguridad Social fue normalizado, dado el incremento de la población por inmigración en los últimos 25 años.


