El Ministerio de Hacienda se encuentra en pleno análisis de una propuesta crucial: lograr que los ingresos de los principales impuestos, como el IRPF y el IVA, lleguen simultáneamente al Estado y a las comunidades autónomas. Jesús Gascón, secretario de Estado de Hacienda, detalló esta iniciativa durante el XXXV Congreso de la Asociación de Inspectores de Hacienda del Estado en Salamanca, evento al que asistieron más de 650 inspectores. Gascón resaltó la complejidad técnica de esta propuesta, que implicaría importantes cambios en la normativa reguladora del sistema de financiación autonómica, especialmente en lo que respecta a las entregas a cuenta.
Actualmente, la Administración General del Estado percibe directamente los ingresos de los impuestos compartidos y, después, transfiere una cantidad predefinida a las comunidades autónomas, que se revisa dos años más tarde. Según Gascón, este sistema es objeto de fuertes críticas por parte de las comunidades autónomas. La propuesta de mejora busca establecer una recaudación simultánea, lo que podría permitir un flujo más uniforme y predecible de fondos.
“Ellos reciben un monto preestablecido fijo. Y luego, dos años después, se liquida el sistema y si la recaudación ha ido bien, pues ese aumento de la recaudación lo perciben dos años después”
El secretario de Estado puso de ejemplo el impuesto de matriculación. Aunque las comunidades autónomas pueden reclamar su gestión, ninguna ha solicitado el traspaso. El argumento es que un sistema de información único y eficiente, alimentado por datos de la Dirección General de Tráfico, es más beneficioso. Este enfoque podría extenderse también a otros impuestos, tanto los gestionados exclusivamente por la Agencia Tributaria como aquellos bajo la administración autonómica.
Respecto a las comprobaciones autonómicas del IRPF, Gascón defendió una mayor colaboración entre las administraciones estatales y autonómicas, lo que implicaría compartir sistemas de información y procedimientos. Aunque algunas competencias se podrían delegar, Gascón subrayó que no es viable hacerlo indiscriminadamente, especialmente en temas sensibles como el control de contribuyentes con patrimonios significativos.
“No tiene ‘ningún sentido’ pensar en la delegación de competencias en cuanto a, por ejemplo, el control de contribuyentes que tienen problemas de delito fiscal o con patrimonios significativos que pueden tener bienes y derechos distribuidos en distintos territorios’’, enfatizó Gascón
La reforma del sistema tributario no solo busca modernizar la gestión, sino también mejorar la cooperación entre las distintas administraciones, haciendo énfasis en la importancia de un sistema cohesionado que utilice tecnologías avanzadas para una gestión más eficaz.
