El producto interior bruto (PIB) de Italia ha sorprendido al registrar un crecimiento del 0,1% en el tercer trimestre del año. Esto se produjo después de que el Instituto Nacional de Estadística de Italia (Istat) revisara al alza el dato de actividad. Previamente, se había reportado una contracción de una décima en el segundo trimestre.
En particular, durante el periodo de julio a septiembre, las tasas de crecimiento trimestrales fueron positivas en sectores clave como la agricultura, que creció un 0,8%, y los servicios, con un aumento del 0,2%. No obstante, la industria mostró una caída del 0,3%. En términos interanuales, la economía italiana creció un 0,6%, superando en dos décimas la estimación preliminar inicial.
Crecimiento económico y estabilidad inflacionaria
Para el año 2025, el Istat ha confirmado que el crecimiento anual acumulado del PIB italiano es del 0,5%, sin modificaciones respecto a evaluaciones anteriores. En paralelo, el Instituto ha reportado que el Índice de Precios de Consumo (IPC) del país se mantuvo estable en noviembre en el 1,2% interanual, aunque el indicador armonizado, utilizado por Eurostat, decreció al 1,1% desde el 1,3% observado en octubre. Por su parte, la inflación subyacente se situó en el 1,8%, una décima menos que el mes anterior.
En cuanto a otros países de la eurozona, el IPC de Francia no experimentó variación en noviembre, presentando una lectura del 0,9%. Al mismo tiempo, el índice armonizado de inflación también se mantuvo en el 0,8%, una de las cifras más bajas en la región. En España, por su parte, el IPC descendió una décima, alcanzando una tasa interanual del 3%, mientras que el IPC armonizado se situó en el 3,1%, igualmente una décima menos que en octubre.


