La aplicación de la nueva normativa de control de las viviendas de uso turístico (VUT) en la Comunitat Valenciana ha llevado a la eliminación de 11.952 viviendas turísticas del registro autonómico durante su primer año de vigencia. Estas acciones se han tomado debido al incumplimiento de requisitos como la falta de referencia catastral o de NIF. Una tercera fase de depuración ya está en marcha, con más de 7.000 bajas previstas, proyectando un registro «completamente actualizado y depurado» para finales de 2025.
Desde la implementación del decreto-ley 9/2024, un total de 8.579 nuevas VUT se han sumado al registro, casi duplicando los registros del periodo anterior. Solo entre enero y julio de 2025, se registraron 4.688 nuevas inscritas: 3.391 en Alicante, 1.506 en Valencia y 791 en Castellón. Actualmente, la Comunitat Valenciana contabiliza 94.259 VUT oficialmente registradas.
La consellera de Innovación, Industria, Comercio y Turismo, Marián Cano, ha valorado positivamente este proceso, destacando que la normativa ha supuesto «una profunda transformación en uno de los subsectores turísticos más relevantes y dinámicos de nuestra economía». Además, Cano ha subrayado que
la norma ha permitido avanzar en la legalidad, control y sostenibilidad de las viviendas turísticas, combatiendo el intrusismo y mejorando la convivencia ciudadana
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El plan de inspección turística de 2024 ha intensificado la vigilancia sobre las VUT con un aumento del 33% en las inspecciones. Más de 450 actuaciones se han realizado en el marco del programa contra el intrusismo y la economía sumergida. Durante 2025, se han introducido inspecciones aleatorias para verificar el cumplimiento de requisitos como la declaración responsable y la compatibilidad urbanística, asegurando así una oferta regulada.
Un avance crucial del nuevo marco normativo es la delegación de la potestad sancionadora a los ayuntamientos. Gracias a un convenio marco con la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP), localidades como València, Benidorm, Faura, entre otras, ya se han adherido. Con esta medida, solo València ha recaudado más de 30.000 euros en sanciones en su primer trimestre de aplicación. Además, se han implementado jornadas formativas y acciones de acompañamiento técnico para facilitar la implementación local.
