En respuesta al reciente anuncio del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sobre la imposición de un arancel del 30% a las exportaciones de la Unión Europea, el Ministerio de Economía, Comercio y Empresa de España ha transmitido un «mensaje de confianza» al sector empresarial del país. La medida estadounidense está programada para entrar en vigor el 1 de agosto.
La preparación de la Unión Europea ante el desafío arancelario
El Ministerio ha reiterado el compromiso de la Unión Europea para adoptar todas las medidas necesarias, que podrían incluir contramedidas proporcionadas si fuese necesario. Fuentes del Ministerio han subrayado que ya está «plenamente desplegada la red de seguridad» del Plan de Respuesta y Relanzamiento Comercial, el cual ofrece un instrumento flexible y dinámico para mitigar cualquier impacto económico resultante de este conflicto comercial.
La UE, de forma coordinada con el Gobierno de España y con el resto de Estados miembro, defenderá los derechos y los intereses de sus consumidores y empresas de acuerdo con las normas internacionales
Además, el Ministerio ha lamentado la decisión de Trump y ha manifestado su respaldo total a la Comisión Europea para «seguir trabajando de manera constructiva hacia una solución negociada mutuamente satisfactoria».
Reacciones desde el gobierno español
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha calificado los aranceles propuestos como «injustificados». A través de su cuenta de X, Sánchez ha manifestado: «La apertura económica y el comercio crean prosperidad. Los aranceles injustificados la destruyen». Sánchez también ha subrayado la importancia de la unidad europea al indicar que, “Unidos, los europeos constituimos el mayor bloque comercial del mundo” y ha instado a utilizar esa fortaleza para lograr un «acuerdo justo» con EEUU.
Por su parte, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, continua abierta a negociar un acuerdo comercial justo, asegurando al presidente estadounidense que Bruselas sigue dispuesta al diálogo, aunque también considera posibles represalias si estas medidas no se revierten.
