La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, ha manifestado la necesidad de eliminar las barreras que persisten en el Mercado Único, señalando que estas limitaciones frenan el Intercambio de ideas en Europa y afectan negativamente al Producto Interior Bruto (PIB) del continente.
Durante un evento en Múnich, Lagarde destacó que «tres cuartas partes de las empresas más innovadoras de Europa ven en la fragmentación del mercado dentro de la UE un obstáculo serio para el crecimiento». Según datos del Fondo Monetario Internacional (FMI), las barreras comerciales internas en Europa, expresadas en tipos arancelarios efectivos, son del 110%, superando ampliamente las barreras impuestas por socios comerciales exteriores.
El orden mundial que ha permitido la prosperidad de Europa está en peligro
La presidenta del BCE subrayó los riesgos que supone el actual panorama de fragmentación geopolítica y bajo crecimiento económico para Europa. Según Lagarde, ante este desafiante escenario, resulta crucial intensificar los esfuerzos de integración para protegerse frente a tendencias proteccionistas globales, un «desafío» crítico dado lo estratégico que es el comercio internacional para la Unión Europea.
Lagarde hizo un llamamiento para redoblar esfuerzos dirigidos a la integración europea, destacando que es imperativo para hacer frente a los desafíos globales actuales. La exministra francesa de Finanzas considera esencial avanzar en la integración para poder defender eficazmente los intereses económicos europeos en un entorno internacional cada vez más proteccionista.
