Las matriculaciones de turismos y todoterrenos en España alcanzaron un total de 90.327 unidades en febrero de 2025, lo que representa un incremento del 11,04% en comparación con las 81.350 unidades registradas en el mismo mes del año anterior. Estos datos han sido proporcionados por las asociaciones de fabricantes (Anfac), concesionarios (Faconauto) y vendedores (Ganvam).
En el acumulado de los dos primeros meses del año, las matriculaciones ascienden a 162.643 unidades, evidenciando un crecimiento del 8,4% respecto al mismo periodo de 2024.
Detalles del crecimiento por canal de ventas
En febrero, los clientes particulares fueron responsables de 40.321 matriculaciones, lo cual representa un aumento del 15,9% interanual. Las empresas matricularon 29.646 unidades en el mismo mes, lo que significa una subida del 3,9%. Sin embargo, las firmas de ‘rent a car’ registraron una disminución del 13% al matricular 20.360 turismos y todoterrenos.
En términos acumulativos, los particulares incrementaron sus compras un 14,1%, mientras que las empresas lo hicieron en un 3%. Por su parte, el renting mostró una subida del 2,5% en lo que va del año, totalizando 38.326 unidades.
Además, las matriculaciones de vehículos comerciales ligeros también mostraron un crecimiento en febrero, alcanzando 13.996 unidades, lo que se traduce en un 8,9% de incremento interanual.
Las matriculaciones de vehículos de combustión siguen en descenso, mientras que las ventas de eléctricos se disparan
Las ventas de coches eléctricos de batería (BEV) continuaron su racha positiva, aumentando un 60,6% en comparativa interanual, logrando 6.112 matriculaciones, que corresponden al 6,8% del mercado total. Los híbridos enchufables (PHEV) y no enchufables (HEV) también vieron incrementos en sus ventas, mientras que las matriculaciones de vehículos de combustión, tanto gasolina como diésel, experimentaron caídas significativas.
En el contexto de vehículos industriales y autobuses, se registró una disminución del 15,5% en febrero, con 2.578 unidades matriculadas. La caída acumulativa en los dos primeros meses del año se sitúa en un 9,6%, lo que pone de manifiesto las diferencias en las tendencias del mercado de automóviles frente al de vehículos comerciales.
