Londres se sitúa a la cabeza en cuanto a precios hoteleros más elevados entre las principales capitales culturales de Europa para este verano. La ciudad experimenta un incremento anual del 10,6%, propulsado por una demanda constante y un calendario de eventos muy activo. Esta información ha sido suministrada por el análisis de tarifas y saturación en OTA realizado por The Data Appeal Company, filial del grupo Almawave.
Roma tampoco se queda atrás, responsable del mayor aumento general con una subida del 13,2%, destacando principalmente en junio y septiembre. Por el contrario, Berlín y Helsinki ofrecen opciones más económicas para el turista. La capital alemana tiene un precio mínimo en agosto de 172 euros antes de incrementar con motivo del Oktoberfest. En Helsinki, la falta de eventos significativos provoca una significativa disminución en los precios hoteleros.
Junio y septiembre se perfilan como los nuevos meses de mayor demanda
Una notable tendencia estacional es la caída de la demanda hotelera en agosto, período que tradicionalmente ha sido el punto álgido del verano europeo. Esto se debe, en parte, a que muchos viajeros prefieren destinos costeros y hay una disminución en el turismo de negocios. En cambio, junio y septiembre han emergido como meses de alta demanda, especialmente en París y Barcelona. Esto se debe a un interés por evitar «multitudes, calor y vuelos caros», convirtiéndose en meses preferidos para quienes desean una experiencia más tranquila y económica.
